Que no falte . . . .
En una familia intentamos de todo para permanecer unidos, terapia, oramos, vamos a la iglesia, consejería, etc.
En la pareja venimos arrastrando problemas desde hace tiempo y ahora queremos solucionar todo de manera rápida, pedimos a Dios el milagro que cambie todo en un instante, todo lo que hemos venido alimentado y construyendo durante años y no funciona. . .
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Creemos tener la fe suficiente de cambiar todo en un instante, lo intentamos y lo intentamos pero no funciona ¿Que sucede?, lo primero que tendemos a hacer es echar la culpa sobre alguien y el principal siempre suele ser Dios.
Hoy un detalle, un componente primordial que en muchos casos olvidamos o hacemos menos importante. . .
Por la mañana hazme saber de tu amor, porque en ti he puesto mi confianza. Hazme saber cuál debe ser mi conducta, porque a ti dirijo mis anhelos.
Salmos 143:8
El amor, ingrediente principal para una vida que avanza, el amor nos permite obtener otra visión de las cosas, las valoraciones y los juicios dejan de ser relevantes en el momento que actuamos por y con amor.
Y si tengo el don de profecía, y entiendo todos los designios secretos de Dios, y sé todas las cosas, y si tengo la fe necesaria para mover montañas, pero no tengo amor, no soy nada.
1 Corintios 13:2
Podemos tener todo, pero aún así es fundamental Tener amor.
Tenemos mucho para hablar del amor de Dios, ese amor que permanece en nosotros, ese amor que necesitamos, el amor que hace que muchas cosas sean posibles
A Dios nunca lo ha visto nadie; pero si nos amamos unos a otros, Dios vive en nosotros y su amor se hace realidad en nosotros
1 Juan 4:12
Vivir en amor, es resultado de vivir en Cristo, esto hace que manifestemos esa naturaleza divina como Dios mismo.
Tienes algunos o todos esos problemas que mencioné a principio?, sigue intentando, prueba con "El ingrediente principal", el amor, y comprueba los resultados! Dios te sigue bendiciendo!
Muchas Gracias por compartir esta lectura, deseo que el Espíritu Santo de Dios traiga revelación de su palabra a nuestras vidas.
