Hablar de sexo es algo que requiere aún en estos tiempos mucha valentía, porque a pesar de que hemos avanzado enormemente en muchos aspectos, el cerebro reptil, sigue tan retrógrado y machista como su nombre lo indica.Me encanta que cada vez haya más mujeres y hombres interesados en explorar su sexualidad y preocuparse también por la satisfacción del otro. En lo particular, tuve muchos tropiezos en mis inicios, pues en mi generación los tabúes estaban a la orden del día y a la vez en crisis por los cambios que ya se estaban gestando para la época con la emancipación femenina, lo que hacía que se hicieran más resistentes tantas creencias absurdas. Afortunadamente para mí, el mundo ha evolucionado muy rápido y yo me he permitido abrirme a nuevos paradigmas y el sexo, no escapa de ello. En estos momentos lo considero una "experiencia religiosa", parafraseando la canción de Enrique Iglesias, pues para mi lo más importante para disfrutar el sexo es que haya una conección de las almas, cosa que me atrevo a asegurar muy pocos logran. Yo me siento privilegiada , porque les juro que yo lo he vivido. Después de eso, la única manera de ver la vida es a colores. jejeje. Exitos amiga. Un abrazo.