Bienvenida a mis sueños

Hoy te soñé…
Y entre el sueño y la querencia, aviste tu apariencia sensual, zigzagueante silueta sobrepasando dunas. Ibas tras las tiernas brumas de aquel inmenso mar, donde el ruidoso coqueteo de las olas impactaban en el silencio de la fría y oscura noche.

Hoy te soñé…
Mirando la hermosura de la luna reflejándose en el mar, y vi el fulgor de tus verdes ojos esparcido en el espejo nocturnal, iluminado de estrellas, y los peces sorprendidos hechizados por tu presencia mágica.

Hoy te soñé…
Y me negaba a desprenderme de la dulzura del aquel sueño extasiado en tu fragancia, tu inocencia, tu figura y esa carita en radiante llamarada de pasión, y yo allí: Necesitado de una caricia tuya… De un suspiro… Vitales para mi respiración.

Hoy te soné…
Hechicera de la noche, caminante esplendorosa, amante de la natura, no quiero que te vayas... Solo quiero pedirte que esperes el sol de la mañana para soñarte despierto.