Desde la aparición de la materia y la energía, todo parece organizarse en ciclos; estos vienen a ser un fenómeno o proceso periódico que se repite continuamente y que pocas veces se descontrolan. De esta forma a lo largo de nuestra vida podremos escuchar hablar de ciclos solares, lunares, hidrológicos, menstruales, celulares, respiratorios, biogeoquímicos, estacionales, de las rocas y atmosféricos, entre otros que seguramente ya conoces.

Vemos entonces que la organización de todo lo existente ha sido fundamental para el Universo, y, a nivel del sistema solar, para nuestro planeta, pues si no sucediera de esta manera no se hubiesen generado las condiciones para que todas las geosferas terrestres se acoplaran y permitiesen la existencia de la vida.

La vida también se organizó y de alguna manera muchos de sus procesos importantes se llevan a través de ciclos. Los mismos que han permitido la aparición y desaparición de las especies animales y vegetales a lo largo de las eras geológicas o historia de la Tierra; sin embargo, a pesar de que todo ha tardado tantos años en acoplarse, el hombre, de aparición reciente, ha cambiado el curso de muchos de estos procesos organizados, alterando en grandes proporciones el funcionamiento de nuestra querida GAIA.

Desde Cervantes Ciencia, siempre llamamos a “hacer ciencia con conciencia”, por eso en esta publicación traemos interesantes temas que seguramente despertarán en ti tu espíritu ecosustentable. Damos la bienvenida en este volumen a nuestro querido @ficciones, quien nos deleitará con el poder del sol y las posibilidades energéticas que pueden generarse para nuestro planeta. En la misma onda informativa, el científico @krhisaeroth nos presenta en un top 5, los lugares más extremos de nuestro planeta… interesante ¿no?
En Filosofía, nuestra querida @ivymalifred confronta la Teoría del Big bang con la divinidad, un tema bastante controversial que definitivamente debes leer. En Tecnología @delpilar nos habla sobre las máquinas virtuales de uso doméstico; mientras que en Ingeniería @Xandra79 se engrana con ciencias puras en el tema de las energías alternativas.
¿Te das cuenta que puedes formar parte de nuestro equipo? Si te gusta escribir sobre ciencia y tienes dominio en algún área de nuestro magazine, no dudes en contactarnos, recuerda que ¡Cervantes Ciencia está hecha para ti!

Esta nueva serie estará super recargada de energía, concursos y curiosidades que deleitarán tu lectura. Te invitamos a estar pendiente de nuestras publicaciones, el podcast de Ciencias y todas las sorpresas que tenemos preparadas para ti.

Recuerda seguir apoyando a @Cervantes como Witness de nuestra comunidad hispana. Si deseas publicar con nosotros, escribe tu propuesta y buscanos en nuestro servidor de Discord. ¡Queremos leerte!

¿Recuerdas que en este interesante artículo te pedimos escribir un final feliz o trágico sobre el destino de la Ciencia y la Filosofía?
¡Pues la mejor historia fue escrita por @odalisrivero y la detallamos para ti! te invitamos a seguir atentos a nuestros concursos. Gracias @odalisrivero por tu apoyo y dedicación.

Tras pasar unos años volvieron a encontrarse y con un estrechón de manos pudieron entablar una amena conversación, la ciencia mirando fijamente a la filosofía le expresa, cuanta falta me haces, en mis noches de desolación y profundos pensamientos recuerdo tus manías, risas y esa forma especial de percibir la vida con diferentes matices. Me detengo a observar el cielo estrellado cada noche, entonces me pregunto si existe una fórmula secreta para el amor. A tu lado podía interpretar mejor el mundo. Conocer y comprender diversidad de cosas. Ahora me doy cuenta que pudimos ser un gran equipo, tus brazos han sido mi refugio y mi sostén, sin ti no hay razón de ser.

Por su parte le responde la filosofía, no te puedo transformar por eso decido comprenderte y aceptarte tal como eres. Admiro de ti esa forma peculiar de entender y saber el porqué de las cosas verificarlas y experimentarlas, nunca te das por vencida, tu manera de tratar y dominar la realidad aflora en mí la motivación de buscar una explicación de los sucesos. Extraño las tardes de cafecito galletas y conversaciones formales con gran objetividad, me alejaban un poco de la rutina. Además, tu dedicación minuciosa siempre esperando un resultado impecable y esa manera especial de ser sin dar mucha importancia a las preocupaciones y la opinión de los demás.

Así finalizó aquella amena conversación y con otro estrechón de manos más allá de pensar en la reconciliación cada quién aceptó y entendió la postura de la otra y a pesar que tomaron rumbos diferentes ahora pueden entender mejor la necesidad y ayuda entre ambas partes.

El concurso está abierto a todos los fotógrafos profesionales y aficionados que deseen participar. Se encuentran excluidos los organizadores, miembros de la revista, y los usuarios que integrarán el jurado.

Normas.

• No se aceptarán fotografías con marcas de agua o publicidad.
• Debe tratarse de fotografías originales y no publicadas en la web ( en caso de ser necesario se solicitará la fotografía original)
• Si se trata de plagio el concursante quedará automáticamente fuera del concurso.
• Se permite el revelado digital (ya sea color, saturación contraste, etc)
• Cada participante puede postular sus fotografías sólo una vez.
• Los derechos sobre las imágenes pertenecen al autor, y este cede permisos a la Revista para la utilización en las futuras ediciones.
• El Ganador será anunciado en el próximo volumen de la Revista
• Se podrán publicar las imágenes desde el primer día en el que aparezca esta publicación, hasta el quinto día del volumen.
• La fotografía debe ser colgada en los comentarios de esta publicación anexando los siguientes aspectos

Nombre del Usuario
fecha de la captura
Localidad o lugar donde fue tomada
Características de la cámara.
Breve descripción de la zona donde fué tomada

El tema

Reino Animal: Fotografía de algún animal invertebrado o vertebrado, en libertad y hábitat natural.
Reino Plantae: Imagen de Cualquier vegetal, incluyendo hongos, en vida silvestre y en su medio natural.
Paisajes: Paisaje natural sin personas, ni urbanismo. El paisaje puede ser diurno o nocturno.

Premiación

La mejor fotografía elegida para publicar ganará 3 sbd y la promoción del usuario en nuestro magazine. ¡A participar!

Bienvenidos a Criptotips y Economía, un espacio donde encontrarás información interesante y valiosa con respecto al mundo financiero que hoy está emergiendo, gracias al fortalecimiento de la tecnología Blockchain y al auge de las criptomonedas.

A nuestra sala de redacción llega la siguiente pregunta:

Responder a esta interrogante es complicado porque es muy difícil de predecir. Teniendo en cuenta que la capacidad actual del sistema, se producen cada 10 minutos 12.5 Bitcoins nuevos, los cuales son proporcionales a 75 Bitcoins cada hora, que, multiplicado por 24 horas, serian 1800 BTC nuevos al día; sin embargo, ¿cuántos se producen al año? Sencillamente realizamos una multiplicación de los 1800 BTC derivados de un día por los 365 días que tiene el año, y eso da el resultado de 657.000 nuevos Bitcoins.

Asumiendo esto como cierto, tenemos que en aproximadamente 6 años se estaría minando el Bitcoin número 21 millones; sin tomar en cuenta el tiempo en el que la recompensa por cada bloque de minería se reduce a la mitad, mejor conocido como Halving Bitcoin o en Español Bitcoin a la mitad. Este se da cada 4 años y después de que la red haya producido 210.000 bloques, ya que cuando comenzó todo este proceso que llamamos minería, por cada minado de bloque la recompensa eran 50 Bitcoins y, desde los dos últimos cortes que sucedieron en los años 2012 y 2016, la recompensa bajo a 12.5 BTC.

Teniendo ya todo un escenario estadístico sobre la producción y el tiempo en que se minará el Bitcoin 21 millones, se estima que para el año 2032 se habrán minado en un 99% todos los Bitcoins existentes; no obstante, como el ritmo de producción poco a poco irá bajando, en conjunto con la dificultad, se especula que no será hasta el año 2140 sé que mine el último Bitcoin.

Aún tenemos muchas preguntas sin respuesta y mientras pase el tiempo iremos abundando en cada una de ellas, para saber de manera precisa qué podría pasar luego de que todos estos Bitcoins sean minados.

En el post La virtualización: Conoce las máquinas virtuales, hicimos un acercamiento a las Máquinas Virtuales (MV). Decíamos allí que son software que te permiten recrear otros, computadoras o programas, en tu propio equipo, sin alterar su configuración, solamente aprovechando los recursos físicos que posee.

Estas máquinas virtuales incluyen varios tipos: sistema y procesos, así como otros modelos para apoyar la TI. Las mismas pueden ser empleadas en los entornos empresariales, de negocios, académicos y domésticos.

Si tienes pensado recurrir al uso doméstico, solo debes considerar los atributos de la computadora personal. En la actualidad, los equipos que salen al mercado poseen las propiedades necesarias para ejecutar una MV, es decir, capacidad en el disco duro, en la memoria RAM, así como el sistema operativo de 32 o 64 bits para su instalación.

Una de las utilidades, mencionadas en el post anterior, que puede ser de uso doméstico, es la incorporación de sistemas operativos en nuestro equipo para conocerlos y aprender sobre ellos. Por ejemplo, probar una nueva versión Windows para comprobar las novedades y diferencias con respecto a las anteriores de Microsoft.

También se puede alternar la ejecución entre diversos sistemas operativos, GNU/Linux y Windows, GNU/Linux y Solaris, y otros más. Al tener activo un sistema operativo mediante la MV podrás, además, ejecutar programas, manipular archivos, almacenar información, entre otros.
Si está interesado en instalar una máquina virtual, es importante tener presente estos dos términos: Host o anfitrión y Guest o invitado, el primero es asignado al equipo que alojará y correrá la MV (nuestro computador o portátil), mientras que el segundo será el sistema seleccionado que se ejecutará con la MV.

En el mercado existen varios programas de máquinas virtuales, cada una con sus propias especificaciones para ser elegida:

Oracle VM VirtualBox: Es una buena opción para empezar. Es muy popular porque es de código abierto y totalmente gratuito. Entre los sistemas que opera están Windows, Linux, Mac OS X, Solaris, es decir, es multiplataforma. Posee una de las interfaces más cómodas la cual se puede administrar de manera sencilla.

VMware: viene en dos modalidades. Player es gratuita, compatible con hosts Windows o Linux como una herramienta básica de máquina virtual, recomendada para uso doméstico. Mientras que Workstation, versión PRO, es comercial, recomendada para empresas porque contiene características más avanzadas. No es el más sencillo de usar porque cuenta con gran variedad de opciones y un alto grado de personalización, pero es recomendable como una excelente segunda opción.

Parallels Desktop (Mac OS X): es la aplicación de MV por excelencia en Mac, es más refinado que los programas de otras plataformas. Está propuesto para los usuarios de Mac que aspiren ejecutar software de Windows. Permite emular Windows (XP, 7, 8 y 10), también algunas versiones de macOS, Solaris, Linux e incluso Chrome OS. Está totalmente optimizada y posee una interfaz amigable para principiantes.

QEMU:es para los amantes de Linux, totalmente gratuita. Puede ser instalado en Windows de 32 y 64 bits y en Mac OS por encima de 10.7. Su interfaz es sencilla e intuitiva, recomendable para principiantes. Otra bondad es la ausencia de privilegios de administración, lo que hace olvidarte de que estás en un sistema secundario.
Por último, Windows Virtual PC: es gratuita, una herramienta de Windows que sirve para emular las versiones anteriores de mismo sistema operativo.

Los software mencionados no son los únicos, pero con ellos podrás incursionar en la virtualización doméstica mediante el uso máquinas virtuales en tu equipo personal, como anfitrión, sin tener que alterar su configuración.

El Sol, nuestra estrella madre, emite hacia el cosmos unos 384,6 yotavatios en forma de radiación electromagnética, de los cuales, 170 millones de gigavatios son recibidos por la tierra. Resulta obvio aspirar a aprovechar esta forma de energía… ¿No?

Nikolái Kardashev, astrofísico ruso, propuso en 1964 una categorización del nivel de desarrollo de las civilizaciones basado en la cantidad de energía que las mismas podían aprovechar. Planteó tres niveles que, muy resumidamente, describen lo siguiente: nivel uno, capaz de aprovechar el total de la energía de su propio planeta; nivel dos, capaz de aprovechar el total de la energía emitida en forma de radiación electromagnética de su estrella (mediante la hipotética esfera de Dyson); y nivel tres, capaz de aprovechar la energía de diversas estrellas en su galaxia.

Quizá no huelgue señalar lo obvio… Aún no alcanzamos el nivel uno de la escala planteada por Kardashev; sin embargo, el aprovechamiento de la energía solar cada día adquiere más relevancia. Kardashev y Freeman Dyson reconocieron a las estrellas como las principales fuentes de energía en el cosmos...

La energía solar, tal como se ilustró en los párrafos anteriores, representa una de las mayores fuentes de energía en nuestro planeta. Parte de esta es aprovechada de forma térmica y eléctrica, para el calentamiento del agua y para la generación de electricidad mediante paneles fotovoltaicos respectivamente. Estos últimos son dispositivos cuyo funcionamiento se basa en la transformación de la energía solar a energía eléctrica mediante el efecto fotovoltaico.

Actualmente, las principales fuentes de energía eléctrica son los combustibles fósiles (65%), la industria hidroeléctrica (17%) y la nuclear (11%). Los combustibles fósiles, además del gran impacto negativo que tienen en el medio ambiente, son un recurso no renovable; sin embargo, como se puede apreciar, la generación de energía en nuestro planeta está ampliamente sustentada en estos.

Se estima que si los niveles de consumo de energía actuales continúan, dentro de 200 años ya se habrán agotado las reservas de los mismos. En este sentido, la energía solar se perfila como una de las principales alternativas… Según Yukinori Kuwano (2012): “una forma de energía ideal”; por ser limpia, inagotable y estar disponible en todo el planeta...

La primera gran aplicación de estos se llevó a cabo en 1958.
El satélite Vanguard 1 fue puesto en órbita con un sistema dual de alimentación: por un lado las tradicionales baterías, y, por el otro, las aún experimentales celdas fotoeléctricas o fotovoltaicas. La aplicación fue un éxito, convirtiéndose de esta forma en la principal fuente de energía para los satélites desde entonces.

El progreso en la optimización de la eficiencia y en la reducción de costos de producción de los mismos, en las últimas décadas, ha significado un gran avance en lo que respecta a la búsqueda de sistemas de producción alternativos y verdes. Actualmente las celdas solares poseen un tiempo de retorno energético (TRE), que se refiere al tiempo en el cual el sistema o equipo debe operar para compensar la energía utilizada en su fabricación, que oscila entre los 6 meses y 1,5 años. Este tiempo, al compararse con sus 30 años de vida útil estimados, arroja que los mismos producirán energía limpia por más del 95% de su vida.

Dicho progreso ha abierto nuevas posibilidades para la aplicación de esta tecnología: en un principio a su implementación en lugares de difícil acceso y alejados de las redes eléctricas y, en la actualidad, a su posicionamiento como tecnología competitiva en el mercado, en comparación con los precios de las industrias eléctricas tradicionales.

Actualmente, diversos países fomentan el uso de la energía solar como complemento del de las redes eléctricas nacionales. Existen, principalmente, dos modelos de aplicaciones para los sistemas residenciales:

Principalmente útil en regiones de difícil acceso o muy distantes de la red eléctrica. Funciona mediante la combinación de las celdas solares, un sistema de baterías y un inversor. Las baterías permiten el almacenamiento del exceso de energía acumulado durante el día, y lo hace disponible en las noches y en los períodos nublados.

Permite la generación de energía y la disposición de la red eléctrica cuando sea necesario. Además, permite la implementación del esquema de Balance neto: el exceso de kilovatios generados durante el día por los paneles solares puede ser introducido a la red eléctrica, generando un descuento en el consumo de la misma. Por ejemplo, este modelo permite que por las noches o en los días nublados se disponga, a través de la red, de los kilovatios de energía eléctrica de exceso que fueron introducidos a esta durante el día.

El aprovechamiento de la energía de nuestro sol es un paso necesario para la humanidad, tanto en lo que respecta a la búsqueda de métodos de generación de energías verdes, como en lo planteado por Kardashev: el salto de la humanidad hacia el siguiente nivel de desarrollo tecnológico está marcado por la capacidad de usar la energía de su estrella madre… Y sí, aún faltan algunos cientos y quizá miles de años para ello.

Escribió para ustedes, @ficciones. Un ingeniero electricista apasionado por la astronomía y la filosofía.

El origen del Universo ha sido un enigma para la ciencia, desde que se tiene conocimiento, y a medida que han evolucionado la astronomía y la física cuántica, diversos científicos como Einstein, Hawking, Fridman, Lemaître, entre otros han invertido gran parte de su tiempo e intelecto para encontrar explicaciones acerca del macro mundo. No ha sido así para el cristianismo, religión que, a partir de la fe en la Biblia, proporciona una explicación sencilla y divina de nuestra existencia y de todo lo que nos rodea: un ser superior omnipresente y todopoderoso es el responsable de la creación.

En principio, el físico Albert Einstein creyó que no, afirmaba que el Universo existe por sí mismo, que es estático, curvo, sin principio ni fin. No obstante, tiempo después se retractó, pues los impresionantes descubrimientos de su colega, George Lemaître, le obligaron a reconocer que el Universo tuvo un comienzo y que no es estático (se expande). Por consiguiente, se despliega la conclusión de que antes del Universo solo existía “La Nada”.
Así pues, lo que las antiguas escrituras establecieron durante decenas de siglos, lo descubrió la ciencia tiempo después: antes no existía “Nada”. Lemaître era sacerdote, así que en principio, Einstein consideró que la teoría del origen del Universo, era un intento arbitrario de su colega para hacer coincidir la ciencia con el Antiguo Testamento, a pesar de que todos los hallazgos de Lemaître se fundamentaron en la Teoría General de la Relatividad.

Lemaître expuso la teoría del átomo primitivo, a partir del cual se generó una gran onda expansiva. Este sacerdote afirmaba que no pretendía explicar la creación de Dios con sus fórmulas, pues a diferencia de estas, Dios está más allá del entendimiento del hombre; aunque sí le causaba satisfacción que sus hallazgos no fueran antagónicos con la idea del poder divino. En este sentido, muchos feligreses pueden encontrar respuestas del Antiguo Testamento en la teoría del big-bang, pues la fe permite considerar a Dios como el responsable de la explosión del átomo primitivo. Ahora bien, el hecho de que ambas teorías coinciden en que hubo un principio y en que antes no había “nada”, hace posible creer que la Ciencia y la fe en Dios pueden ir de la mano.
Por otro lado, creyentes como Lemaître y el Papa Juan Pablo II, consideraban que la ciencia siempre sería muy limitada si se comparaba con el acto de fe. La explicación de una no tiene por qué desmentir a la otra y, además, los asuntos divinos jamás podrían comprobarse a través de la ciencia, lo cual es tanto innecesario como inútil.

Papa Juan Pablo II afirmó en 1936 durante un congreso, que el científico creyente goza de ventaja sobre el ateo, puesto que posee la serenidad de estar conforme con no encontrar todas las respuestas en la ciencia. En la sección Filosofía de la Ciencia de “Cervantes Ciencia”, nos hemos dedicado en muchas de las entregas a argumentar sobre la complementariedad que debe existir entre áreas del saber, pues abogamos por la búsqueda del conocimiento de manera integral y multidisciplinaria.
Este artículo no es la excepción, y nos permite concluir que la Ciencia no tiene porqué considerarse opuesta a la fe. Así pues, la elección de creer o no en un poder superior está basada en ideologías y no en argumentos científicos; al final, si algo hemos aprendido de la ciencia es que cada respuesta es el principio de una nueva serie de interrogantes.

Filosofar potencia tu mente