Los dientes de leche

Aunque nacen durante el embarazo y cada diente asoma se celebra como un cumpleaños al principio, su final es inevitable: todos se caen. Sin embargo, la espera del Ratoncito Pérez es larga. Hasta los 5 o 6 años los primeros dientes se caerán para dejar espacio a los definitivos. Por eso, hay quienes piensan que no importa como se cuiden los dientes de leche. Algo que no es cierto. Su cuidado es determinante para procurar que los que aparezcan después lo hagan en un buen estado, así como para prevenir caries y infecciones. La aparición de los dientes de leche comienzan entre los 6 y 8 meses de vida, pero su formación se inicia en la sexta semana del embarazo. por esto, es fundamental la alimentación de la madre durante la gestación, incluso los dientes permanentes comienzan su constitución en ese momento.
El proceso de la dentición suele extenderse hasta los 20 0 30 meses de vida, es decir, dos años o más. Pero hay excepciones, no es cierto que los niños a los que los dientes le tardan un poco más en salir sufran una carencia de calcio. Aunque si su aparición se retrasa de manera considerable, una vez que el niño se aproxima al año de vida, conviene consultarlo con el medico ya que puede deberse al raquitismo o alteraciones nutricionales.
El principio de la dentición se nota sobre todo en las encías; se inflaman y se ponen más sensibles e irritables, e incluso pueden aparecer pequeños hematomas. El niño también babea más y rechaza el alimento. Cada pieza presiona y atraviesa el tejido que esta en las encías llamado membrana periodontal y eso genera dolor. El sueño del bebe puede verse alterado, para aliviarlo, el pequeño tiende a llevarse cualquier objeto o sus dedos a la boca. Lo más recomendable es darle algún elemento frío y duro que pueda morder como unos mordedores refrigerados, también se le pueden dar suaves masajes en las encías. Si el malestar es muy intenso, el pediatra recetará algún analgésico, esto es lo que origina que los niños rechacen los alimentos: el dolor que se le genera el roce de la cuchara hacen que coman peor. Es común que el niño se lleve a la boca todo lo que encuentre con el fin de aliviar sus molestias y llegan más gérmenes a su sistema digestivo. Por otro lado a medida que el niño crece, nuevos alimentos aparecen en su dita y esos cambios pueden ocasionar reacciones diversas, todo esto puede causar diarrea y otras molestias.
Es poco frecuente pero a veces alguna pieza dental no se forma por razones congénitas ( este problema lleva el nombre de agenesia dental). El especialista informará sobre como actuar en cada caso.
Los primeros dientes deben limpiarse con gasas, pues las caries pueden originarse incluso con el primer diente. Cuidarlos es fundamental por varios motivos: esta erosión bacteriana puede producir mucho dolor y afectar la masticación, el sueño, la manera de hablar y jugar del niño, su autoestima. Si se produce un infección, se puede transmitir a los dientes definitivos que están debajo.