MADRE
Brotamos de una Madre que ofrece un amor que todo lo sustenta y hace florecer y prosperar. Un sí eterno.
La Madre enseña, da el sustento, la purificación.
NO COMETE ERRORES.
El sistema está diseñado para considerarla como la primera otredad, separando de entrada ambos hemisferios cerebrales, considerando a lo femenino como el enemigo, como algo aterrador, como algo que debe ser inventariado y tasado.
Y se le pone precio a la tierra, a la mujer. Se hizo botín de guerra. ¿Cuanto dinero vale una madre? ¿Le pondrías precio a la de otro, a la tuya?
Es invaluable.
Es más valiosa que todo el oro del universo porque es esencia pura.
El respeto comienza por permitir la expresión de lo femenino y reconocer su existencia.
Lo Femenino es la VERDADERA FUENTE, de donde surge todo y ya es hora de re-conocer nuestro justo lugar en este camino.
Si no lo hacemos, pues no seremos reconocidos por esa esencia femenina y corremos el riesgo de ser considerados como virus por la Madre.
La labor de estar encarnado requiere ser guardián de las semillas, las flores y el agua... Ser conciencia es el único rumbo, la única forma de integrar espíritu y materia.