Historia de un poema (Al paso de la guerra)

Cuando escribí este poema que les presentaré a continuación, me sentía muy triste y preocupada, por los acontecimientos bélicos que ocurrían en el mundo. Las imágenes que daba la televisión eran muy fuertes. Mi dolor por las madres y los niños y los ancianos indefensos, los hombres y mujeres del pueblo; iba creciendo y fue haciendo un hueco profundo en mi ánimo. Era como un abatimiento imaginario con consecuencias reales. Somatizaba la angustia. Tal vez era cuestión de empatía.
La tele reportaba noticias de Irak, Siria, Palestina, por nombrar algunas.
Yo imaginaba el tormento de las personas en las noches tan oscuras, cuando escuchaban el sonido de los aviones de guerra y que era inminente la caída de las bombas que destrozarían sus casas y habría heridos y muertos. Ellos mismos, familiares, amigos o desconocidos. Creo que no hay egoísmo en esa sensación de terror. Toda la familia guarecida en la fortaleza de un abrazo o bajo las camas o dentro de los armarios. En fin, hipótesis de lo no vivido.
Poco a poco me sumergía en un estado depresivo y se fue formando en mí, un torbellino de angustias (tal vez ese es el estado perfecto para parir un poema, o una pintura o una escultura). Ya por esos tiempo hacía mis borrones en versos, o por lo menos, así les llamaba yo. Nunca creí que fuesen buenos, pero tampoco, ofendían a los poetas.
Así, palabras más o menos, amanecí una mañana, releyendo los trazos de una noche de insomnio y delirio.
Nació un poema, que llevé a concurso en un foro de poesía. Le dije sí, a un amigo y como no disponía de tiempo para elaborar uno, me arriesgué a presentar mi propuesta. Un soneto alejandrino, que ganó el primer lugar y me otorgaron una medalla. En los foros de poesía en que he participado, me identifico con el seudónimo "la muka" y a veces aparezco como Ana "la muka".
Por cierto, alejada del mundo de los foros, por circunstancias adversas en mi vida, estoy tratando de replantear el uso del tiempo, con vientos favorables, lo que me llevó a seguir el consejo de una buena amistad y vine a "steemit". Entre vientos y mareas, hoy agradezco al universo, una nueva dosis de energía que me embarga, afrontando con fuerza este nuevo reto que hoy día tengo. La situación del país, también me ha impulsado a desempolvar este poema, pues veo reflejados los efectos de la crisis en la devastación de los cuerpos y mentes de mis hermanos venezolanos.
No lo dejo a la buena de Dios, pero sí, a a vuestra gentil lectura.