Utopía

in #spanish6 years ago

image.jpeg
Fuente

Una ventisca de incertidumbre chocaban contra un cuerpo, partículas de polvo se posaban en las pestañas de aquel extraño que se hallaba inmóvil boca bajo. Las aves carroñeras sobre volaban el lugar formando sombras que danzaban en el suelo, a la dulce espera de poder servirse un fresco y maravilloso banquete, mientras que las moscas frotaban sus patas delanteras para ejecutar un indecente plan.

Inesperadamente

Los signos vitales regresaron de golpe y una especie de estímulo en su mano izquierda espantó la muerte. Paulatinamente recuperó los movimientos de su cuerpo y logró sentarse sobre el terreno árido que disponía a su alrededor, no tardó en percatarse; que el lugar había sido abandonado abruptamente; pero ¿por qué? En medio de la confusión y la ceguera le pareció ver algo más adelante, quiso levantarse pero el dolor y la debilidad se lo impedían; se colocó en posición para gatear, lo único que logró fue arrastrarse y gimotear. Recorrió un pequeño estrecho lo suficiente para visualizar cientos de cadáveres que reposaban en una gran mancha de sangre seca.

Aún convaleciente, siguió deslizándose entre las rocas, en ocasiones algunas espinas; traspasaban su carne, su avance le confirmaba que todos habían sido mutilados, trato de sosegar la respiración buscando explicaciones, pero la sensación de asquerosidad; lo hizo vomitar encima de un octogenario en etapa de descomposición. Abrirse camino cruzando la pestilencia; la putrefacción, los gusanos, la sangre, el hedor insoportable, no era fácil.

La muerte fue forzada a estar presente en ese territorio.

Mientras más adelantaba aquel individuo, torbellinos de preguntas se creaban en su mente, morir de sed era más cruel que no tener respuestas, El sol cocía sus esperanzas, estaba enclenque pero a la vez afanoso de seguir luchando, intento una última oportunidad de mantenerse en pie, logrando dar unos pasos hasta estrellarse en el pavimento y perder el conocimiento.

— ¡Mira hermano! ¡Carajo puedo ver su columna! ¿Dónde está lo que falta de su espalda? —dice un joven.

— Es obvio, lo torturaron como a los otros, me pregunto ¿por qué a todos? vámonos, debemos llevar la leña antes del mediodía, además si nuestra madre se entera que estuvimos fisgoneando nos irá de espanto —exclama un segundo joven.

— Vale en marcha, ¡espera, este hombre acaba de moverse! —Dice y añade estupefacto el chico —¿Está vivo?

— Efectivamente lo está, su pulso es débil debemos llevarlo con nosotros, baja la leña ¡apresúrate o no la contará! —expresa el joven de aspecto mayor.

La esperanza se encendió para aquel moribundo, su vida dependía de dos jovencitos, un viejo caballo y un delgado hilo de suerte

— ¡Espero la rueda resista! —dice el menor de los hermanos.

— ¡Cállate ave de mal presagio! y apresura a ese perezoso, ¡rayos mamá nos matará! —expone inquieto el joven.

6 días después...

La luminosidad nuevamente penetraba en las pupilas, su sistema nervioso respondía a las incitaciones del cerebro, despertó en una cama caliente, resguardado del frío, el malestar había cesado, una imagen deformada por la bombilla aparece, y una voz retumbaba en la cabeza del desdichado.

— La temperatura bajó, ¿cómo se siente? — pregunta alguien.

— ¿Dónde estoy? — pregunta él confundido.

— Soy la Dra. Laura está en la enfermería, mis sobrinos lo hallaron, afortunadamente logramos salvar su vida ¿Cuál es su nombre? — exclama y pregunta la mujer.

— ¡Oh, no lo recuerdo, estoy en blanco! —replica con tristeza el extraño, mientras limpiaba su cara ocultando lagrimas pálidas que rodaban por sus mejillas.

— ¡Cálmese, usted recibió una golpiza muy fuerte! su cabeza y espalda se llevaron la peor parte, tranquilícese los recuerdos retornarán, descanse —expresa la dama.

La amnesia debido al trauma se alargaba y su médico le sugería permanecer cerca, aconsejándole conocer al pueblo y a las personas.

Los meses acontecían, aquel hombre mejoro físicamente ganando la admiración de muchos, era popular entre los chicos, quienes jugaban a colocarle nombres con la intención de atinar el verdadero. La Dra. Laura lo llamaba Manuel, ambos fraguaron un afecto cordial.

—Soy el hombre de mil nombres —expresaba él riendo.

Su residencia era una habitación improvisada detrás de la enfermería, a pesar de su amnesia Manuel era feliz, los habitantes del pueblo eran su familia.

Una noche, ya en la cama extasiado en un libro que faltaba poco por terminar, escucho chillidos, guardó silencio para confirmar que no era un juego de su mente, efectivamente alguien requería ayuda, corrió como alma que llevaba el diablo siguiendo los gritos. La familia Hernández estaba atrapada en las voraces llamas de un infierno que abrazaba su pequeño hogar, tuvo el impulso de quitarle la chaqueta al sr. Esteban y se sumergió en el bebedero de los caballos, empapado siguió hasta la casa y comenzó abrirse paso entre las llamas, los habitantes del pueblo hacían cadenas humanas pasando vasijas de agua e intentaban extinguir el fuego, pero resultaba imposible disipar la garganta del demonio. Laura y sus sobrinos perdían la esperanza de volver a ver con vida al amnésico hombre.

Manuel apareció como un ángel que ardía en llamas, en total rescato 4 vidas, Laura se abalanzó sobre el llorando.

— ¡Qué bueno que estás bien! —exclama ella entre lágrimas.

Él fue el último en chequearse, había sufrido quemaduras nada grave, pero Laura insistía en revisarlo, la última venda en el rostro los colocó en una posición comprometedora la Dra. Se veía reflejada en los ojos azules de aquel hombre de piel blanca, cabello ondulado de color negro, labios carnosos que la incitaban a besar, tímidamente unieron sus labios y rozaron sus lenguas entre la dulce miel de sus bocas, Manuel bajo a su cuello y encendió la pasión que esa noche los quemaría en el placer, la lujuria y el amor; escapándose entre los gemido un té amo y cásate conmigo.

Los años pasaron, Manuel y Laura eran padres de dos niños hermosos, un matrimonio y hogar estable, reinaba la armonía el amor, los recuerdos nunca regresaron pero a él no le importaba, adoraba su nueva vida. El pueblo creció y era uno de los más prósperos de Texas.

Amaba sentarse cada mañana en su vieja mecedora, disfrutar su café y ver a sus hijos en el frente luchar con un muñeco de paja, de pronto su taza comenzó a vibrar, la campana que notificaba las visitas sonaba inquietamente, estaba confundido miró a sus hijos para advertirles que regresaran a casa, pero las cabezas de estos volaron por los aires. Hombres en caballos habían mutilado a los niños. Manuel se paralizó de horror y Laura quien fue testigo de todo por la ventana, corrió hacia los cuerpos ensangrentados de sus criaturas y la recibió un hacha en el estómago; desmembrando sus órganos en un segundo.

— ¡Lau, no Laura, niños! ¡Malditos que han hecho con mi familia! —grita Manuel ahogado en el dolor y la rabia, mientras se lanza sobre los asesinos.

Pero los hombres lo dominan y comienzan a golpearlo, el mantenía la vista en su amada familia y noto que Laura trataba de tomar su mano el estiro su brazo para alcanzarla.

— ¡Los eternos enamorados, desean tomarse de las manos para irse al encuentro con la muerte! —Exclama el líder y agrega —traigan mi hacha.

Colocan a Manuel de bruces y él logra sostener la mano izquierda de ella, mientras el brillo de los ojos de su esposa se desvanece; él se ahoga en llanto y recibe un certero hachazo en la espalda haciendo vomitar la sangre, Sumergiéndolo en la oscuridad.

— ¿Eres nueva? —pregunta una enfermera.

— Sí, soy la pasante ¡Estoy un poco perdida! —replica una estudiante de enfermería.

— ¡Mira ese paciente está muy inquieto! —comenta la pasante.

— ¡Rayos, iré por el médico! — pronuncia la enfermera

— ¡Señor, me escucha! soy el doctor Quiroz, está en la clínica Houston —dice el médico, ordenando a la enfermera, comunicarse inmediatamente con los familiares del paciente.
. .
— Disculpa colega ¿por qué tanto alboroto con ese paciente? —pregunta la ignorante pasante.

— No es cualquier paciente, ese hombre, es: José Manuel fuentes, director de una orquesta, viajaba con todos los músicos incluyendo su esposa e hijos, cuando una góndola invistió el autobús donde iban, él fue el único sobreviviente. Lleva 12 años en coma. —comenta una mujer.

— ¿Dónde están? ¿Dónde está mi familia? ¡Laura! ¿Qué paso con Laura? mi familia —expresa en llanto aquel hombre confundido mientras el personal medico intentaba tranquilizarlo.


image.jpeg

Duente



image.jpeg

Sort:  

Congratulations! This post has been upvoted from the communal account, @minnowsupport, by AreMomtilla from the Minnow Support Project. It's a witness project run by aggroed, ausbitbank, teamsteem, someguy123, neoxian, followbtcnews, and netuoso. The goal is to help Steemit grow by supporting Minnows. Please find us at the Peace, Abundance, and Liberty Network (PALnet) Discord Channel. It's a completely public and open space to all members of the Steemit community who voluntarily choose to be there.

If you would like to delegate to the Minnow Support Project you can do so by clicking on the following links: 50SP, 100SP, 250SP, 500SP, 1000SP, 5000SP.
Be sure to leave at least 50SP undelegated on your account.

Tocaya, buena historia. Algo cruel para mi pero me enganchó, de verdad me gustó.

XD cruel? Esta bonita, a mí me gusto Jajajajaja ya sabes cómo se maneja mi mente estos últimos meses 😂 Qué bueno que te engancho, gracias por leerme querida 😘 Saludos @antoniarhuiz

Tu entrada ha sido valorada por @mariart1 en el programa Entre Líneas de La Taguara. |Jueves 8:00 pm| Para más información, os invito a formar parte de nuestro de servidor de Discord.
Gracias por compartir tu publicación.

Coin Marketplace

STEEM 0.19
TRX 0.13
JST 0.030
BTC 63768.98
ETH 3410.21
USDT 1.00
SBD 2.49