Hola Malayos y Malayas 😘

Hace unos meses iba rumbo a mi trabajo y la falta de transporte me obligó a subirme a una chirinchera, (vehículo pesado, totalmente modificado para transportar pasajeros) necesitaba llegar temprano a mi primer destino ¡el centro de Maracaibo!

-¡Que molleja! estoy sudando como un puerco, malayo catire ¡amaneciste apagado! (sol fuerte) y dígame la chirinchera esa, me sentía como si estuviera encaramaa en el lomo del robot Optimus Prime, ¡yo creo que el bicho ese donde me vine es marca selecat! si, se le cae toda broma, pura chatarra Transformers (risas)

Emprendí mi camino a toda prisa, era temprano y la avenida libertador a esa hora es peligrosa, aunque hay vendedores abriendo y organizando sus puestos no me confió, yo les llamo testigos silenciosos porque nunca ayudan a las víctimas del hampa, solo se quedan observando cómo si nada pasara.

-¡Malayo calor! me hace falta un guarapo e panela y limón ¡no me quiero imaginar esta verga a las 12 del día! Mejor le meto a la mocha (prisa) esta vaina es pelúa por aquí.

El estrecho que me faltaba para llegar a la próxima parada era bastante y recuerdo que me enamore de unas blusas bien lindas, me distraje tanto que termine chocando con un muchacho que también iba apurado.

-¡Ay disculpa! -Le dije.
-No tranquila mija vos no te preocupéis, la culpa es mía ¡casi te llevo pa mi casa! (risas)

El muchacho después de disculparse sigue su camino y sentí que debía tratar de seguirle el paso para tener compañía.

-¡Vertalisión que esmollejao va ese chamo! Voy a dejar la malaya lengua tratando de agarrarle el ritmo, estoy más lenta que un alka seltser en vaso de chicha. ¡Dios mío! será que estoy gorda ¡tengo que hacer dieta, me estoy ahogando!

El chico llevaba un bolso en su espalda, en la mano izquierda un maletín y en la otra una bolsita de papel, imagino que se trataba de su desayuno.

-¡Que molleja va pulgáo! Como que lleva flojo el barro (diarrea) mi alma ¿será que va esvergatiao (prisa) porque lleva más hambre que un loco?

Así pase 15 minutos en ese plan, tratando de alcanzarlo y llevarle el paso. ¡De pronto! Un hombre aparece de la nada y queda en el medio de los dos, lo agarra del bolso que lleva en la espalda y de un tirón tumba a mi compañero de camino al suelo:

-¡Ay Chinita! ¡Ay mi madre! ¿Ahora que hago? ¡Después que atraque aquel, viene por mí, verga esto solo le pasa al coyote y a mí!

Tendido en el suelo el muchacho estaba más blanco que Gasparin, no se movía, tampoco hablaba, estaba en shock y su agresor casi encima de él le grita:

-¡Pila pues estas atracado! cuidado con una verga remardito! Aquí tengo el hierro.

Fuente

No sé que me pasó pero solita me metí en el paquete, el malandro ni pendiente conmigo y yo más quieta que un poste eléctrico, parecía que en cada pierna tenía una bolsa de cemento.

-¡Malaya sea mi suerte chico! ¿por qué me pasan estas cosas a mi? -me repetía mientras el muchacho en el suelo casi llorando dice:

-¡Primo no me vais a joder! yo tengo una coñita (niña) recién nacida, soy el que lleva la papa a la casa. Mira yo voy saliendo del trabajo, voy rumbo a buscar a la carajita en casa de mi suegra.

El muchacho rogaba que no le quitara la vida, mientras tanto yo era testigo, estaba tan cerca que hubo segundos de tensión entre los tres; todos nos mirábamos, no podía moverme

-¡Que mondenga toy más salaa que yogurt de ocumo! ¿por qué no puedo salir esmollejada? si el malandro se enamoró fue del muchacho no de mi, vais malayas piernas me van atracar por culpa de ustedes, no entiendo que hago aquí, ¡yo no tengo vela en este entierro!

El muchacho insistía que no le hiciera daño y de un grito el maleante lo calla.

-¡Calláte vergación! ¡Lo que habláis es verga! ¡Hay coño vas a llorar! ¡Dame la bolsa nojoda!

Yo con los ojos puyuos, prácticamente inmóvil averiguando el brollo pensé en ese momento:

-¡Ay pobresito le va a quitar todo, malayo malandro, desgraciao ese como que no tiene familia chico! luego viene por mí quiero llorar.

El muchacho estira los brazos para entregarle él morral, el maletín, se saca la cartera y le dice:

-¡Toma quédate con toa esa verga! Lo material se recupera, pero no me mates primo.

El choro alterado le grita nuevamente al chamo:

-¡Cállate vergación!, ¡Táis como las cajas negras, decís toa verga! me cargáis ARRECHO, soy más necio que un cadillo en el ojo nojoda, dame la remardita bolsa esa.

Y de un tirón le arrancó la bolsa del desayuno si, como lees ¡la bolsita esa!

Yo quede como 😦

-Queeeeeeee ¡a la verga! el malandro quiere es la bolsa del desayuno, que guachafa es esa ¡que molleja! ya ni los atracos son serios en este país chicos.

Increíble, el tipo solo toma la bolsa revisa, saca una empanada y la muerde con rabia, mira las manos del chamo y vuelve a revisar.

El muchacho, los buhoneros y yo observamos estupefactos lo que hacia, nuevamente muerde otra empanada, casi se la traga de un bocado, se voltea y me mira

-¡Ay chinita me jodi, me está mirando más ordinario! ¿será que también me va a pedir un beso?

Todos estábamos esperando un desenlace fatal y notamos que seguía comiendo con mucha rabia, comienza alejarse unos pasos, el chamo hace a levantarse, pensando que el peligro ya había pasado y me mira estaba más pálido que Michael Jackson.

¡De pronto el tipo regresa, lo toma por sorpresa, saca el arma y se la pone en la frente al muchacho!

-¡Ay chinita! Lo va a matar y a mí también por ser testigo, ¡Dios mío ya estoy muerta estoy cagada!

El choro con el arma apuntando a la víctima exclama con la boca llena, casi que escupiendo comida:

-Mira triremardito lo que me provoca es caerte a tiro nojoda, ¡PARA LA PRÓXIMA MIJO! ¡PEDÍ GUASACACA! 😡

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Le dio una patada al asustado chico y se fue.😱

Este susto fue más feo que cagar con hipo (Jajajajajajaja) todos estábamos cuajado de la risa y comentábamos lo sucedido. XD

¿Increíble verdad? él hambre asota a todos en Venezuela. Amigo lector nunca dejes de pedir la salsa, eso podría salvarte la vida XD

PD: Pido disculpa por las malas palabras 😇