PROGRAMACIÓN NEUROLINGUÍSTICA - INTELIGENCIA EMOCIONAL - PARTE 1

INTELIGENCIA EMOCIONAL

El origen de la Inteligencia Emocional se remonta al concepto de Inteligencia social de Edward L. Thorndike (1920), que contempla la capacidad para entender y gestionar personas y para actuar sabiamente en las relaciones humanas.

DAVID WECHSLER en 1940 diferenció entre elementos y elementos intelectuales por los cuales el asignó factores afectivos, personales y sociales. En 1943 proponía que las capacidades no intelectuales son esenciales para predecir la capacidad de tener éxito en la vida. Siguió HOWARD GARDNER 1983) con su trabajo sobre inteligencias múltiples y, más específicamente, en sus conceptos de inteligencia inter e intrapersonal, La que fue introducida por primera vez en el campo de la psicologia en 1990 por los investigadores PETER SALOVEY Y JHON D. MEYER definiéndola como "la capacidad de de percibir los sentimientos propios y los de los demás, distinguir entre ellos y servirse de esa información para guiar el pensamiento y la conducta de uno mismo. En 1995 en su Best Seller DANIEL GOLEMAN nos explica que " es la capacidad para reconocer sentimientos en sí mismo y en otros, siendo hábil para manejarlos al trabajar con otros.

o ¿Qué es ser inteligente emocionalmente?

El camino de nuestra vida está marcado por las emociones. Ellas están presentes durante las 24 horas del día. Y nos afectan de manera visible e invisible. Al mismo tiempo, podemos reconocernos como individuos inteligentes capaces de resolver, identificar, definir, conceptualizar, y muchas cosas más que nos permiten lucir nuestro coeficiente intelectual. Por lo tanto, como seres complejos: somos inteligentes y emocionales.

Estos dos conceptos son la clave, ¿cómo los unimos? Las emociones solas no pueden constituir una vida digna y la razón sola, tampoco podría hacerlo sin que todo se volviera frio e insignificante.

Sabemos por propia experiencia que, a veces, las situaciones que vivimos no nos dejan satisfechos. Deberíamos haber respondido de otro modo o podríamos haber evitado un desborde o hubiéramos actuado sin irritarnos o... tantas otras cosa mejores, para nosotros o para quienes nos rodean.

Entonces, ¿qué es ser inteligentes emocionalmente? Es poseer esa rara cualidad de conocer, regular y administrar nuestras emociones con la finalidad de lograr el éxito en las más variadas áreas de nuestra vida. Es esa flexibilidad que poseemos todos para adaptarnos interna y externamente, a las circunstancias de cada dia con efectividad.

Es esa destreza la que permite que nos miremos a nosotros mismos, que interactuemos con el mundo, conociendo y afrontando las emociones que surjan y sentirnos igualmente satisfechos, eficaces y creativos, con nuevos hábitos mentales para establecer vínculos en una optima interacción social.

Una opción para adquirir estas condiciones es entrenar las emociones hasta llegar, efectivamente, a regularlas y a lograr sentirnos plenos cuando nos encontramos solos o cuando estamos en relación, ESA ES LA INTELIGENCIA EMOCIONAL.

Es el sendero que nos lleva al logro de nuestro pleno poder interno. Es seguir nuestra propia huella, explorando, indagando y afianzando las facultades, capacidades y cualidades de las que disponemos.

Todos conocemos, en mayor o en menor medida, las alteraciones entre nuestra mente y nuestro corazón, pensamientos y sentimientos, a partir del impacto que nos producen las cosas que nos pasan: un suceso en el trabajo, un estruendo en la calle o un aroma que llega de la cocina, por ejemplo.

El asunto es poder reconocer y regular la emoción que químicamente se dispara. En esto consiste la capacidad de responder, no de reaccionar y de perder el control. Una respuesta adecuada mantiene un clima de saludable respeto, donde es posible el disenso y el dialogo sin alteraciones ni violencias.

Al crearse nuevos hábitos mentales, la vida se enriquece enormemente. Entre otras cosa se favorecen la creatividad, la productividad y las relaciones interpersonales en todos los ámbitos.

o ¿Cómo era entonces?

En la antigüedad, los sabios ya la conocían aunque la nombraran de otro modo. Tal vez una famosa frase de Aristóteles logre aclarar la idea:

"Cualquiera puede enfadarse eso es muy sencillo. Pero enfadarse con la persona adecuada, con el grado exacto, en el momento oportuno, con el propósito justo y del modo correcto, eso, ciertamente no es sencillo”

Si en aquellos antiquísimos tiempos existía un ideal de vida armoniosa basada en simples principios morales, el siglo XXI nos regala la posibilidad de ampliar las condiciones de nuestra vida y de regirla con inteligencia, son principios y valores que nos rescatan de las intoxicaciones emocionales que nos acosan.

o ¿Por qué siempre, en nuestras relaciones o ante nosotros mismos, tendríamos que emplear emociones nocivas representando, por ejemplo, a la victima?

El misterio se devela al erguirnos como líderes de la propia vida, de la familia, de nuestro ámbito laboral. Y, no necesariamente alguien debe designarnos con el nombre de líder. Simplemente, podemos decidirlo, podemos capacitarnos, adquirir la visión necesaria para cambiar las cosas en el área que sea, como compañero, padre, amigo, gerente o entrenador de futbol y convertirnos en empresarios de nuestra vida o de nuestra organización. TODO ES CUESTION DE CONCIENCIA. UNA

NUEVA CONCIECIA.

o ¿Cómo logramos esta deseada armonía en nuestras vidas? ¿cómo interactuamos con el mundo teniendo una nueva mirada?

En principio, tenemos que realizar un ajuste entre la persona que uno cree que es - en valores, creencias y aptitudes - y las demandas que existen en los lugares donde nos desempeñamos, en la familia, el trabajo, la pareja. Todo esto ayuda en varias direcciones ya que tenemos que saber qué es lo queremos y decidirnos a producir el cambio, ser conscientes del proceso que implica y estar constantemente presentes en el. Es un cambio conductual, autodirigido.

Es posible hacerlo, admitiendo nuestras emociones y reconociéndolas, poniéndoles el nombre adecuado, sin confundirlas ni disfrazarlas. Podemos enviarlas al mundo exterior reguladamente, sin estallidos que nos hagan sentir mal con nosotros mismos o dañando a otros por no haberlos tenido en cuenta. Es como aplicar un control sobre los impulsos , tomando los hechos de la vida con entusiasmo y perseverancia, observando y teniendo en cuenta a quienes están a nuestro lado con empatía , condiciones indispensables para una buena y creativa adaptación e interacción social.

o Caja de herramientas

Una forma fácil y rápida consiste en cambiar, de inmediato, ese cuadro mental que condujo a la emoción desagradable, es decir, transformar la escena inicial emocionalmente negativa con emociones positivas. Eso relaja, produce contento y optimismo, permite ver más cosas que cuando se está perturbado. Con esta nueva actitud emocional, es posible pararse ante el jefe, frente a la vida o frente a cualquier otra situación difícil. Lo mejor para nuestra vida y nuestras relaciones es olvidar la vieja conducta de seguir rumiando por días y días lo que paso, sin dormir o pasándola muy mal.

Si decidimos adquirir diferentes maneras de pensar como actuamos con nosotros mismos y con el entorno, veremos que los investigadores de inteligencia emocional coinciden, en general, en que es necesario considerar algunos aspectos personales y otros sociales para profundizar o ampliar los nuevos hábitos mentales que nos harán más capaces emocionalmente.

a) Aptitudes personales.

AUTOCONOCIMIENTO: conocer las propias emociones, las, darles nombre, detectar los propios límites, adquirir certezas de uno mismo y seguridad.

AUTOREGULACION: aprender a controlar las emociones, a canalizarlas correctamente a ser confiables y confiar, ser exactos y meticulosos, ser flexibles e innovadores.

MOTIVACION: tener afán de triunfo, comprometerse, tener iniciativa, ser optimista.

b) Aptitudes sociales.

EMPATIA: la capacidad de percibir intereses ajenos , de comprender a los demás emplear la amabilidad, colaborar con el crecimiento de los otros , aprovechar la diversidad que nos rodea, orientarse hacia el servicio y llegar a interpretar las corrientes emocionales del grupo.

HABILIDAD SOCIAL: contribuir para lograr las respuestas deseadas con un sentido sano e integro, influir saludablemente , comunicar mensajes transparentes y convincentes, resolver situaciones de conflicto escuchando y hablando , iniciar estratégicamente cambios , trabajar con los demás con un ideal en común, adquirir habilidades para trabajar en equipo y que su sinergia logre el bien común.

Fuente 1: Conocimiento propio.
Fuente 2: Inteligencia emocional-Daniel Goleman