Ver el cielo puede resultar, muy tranquilizante y en mi caso particular me llena de optimismo, de valor.

Tengo varios días sin subir un pos, pues mi vida ha estado más trajinada que de costumbre, y es que cuando vives en un mundo paralelo al real (Venezuela), lo las simple se vuelve complejo.

Busque entonces entre tooodas mis fotos, para inspirarme y escribirles algo lindo, alejado de cualquier cosa negativa. Revisando cada carpeta noto que SIEMPRE tomo fotos al cielo, y es algo de lo que hasta hoy ni siquiera tenía conciencia.

Internalizándolo, reconozco que me parece que el cielo es hermoso, y que dependiendo de las diferentes horas del día, el color y las texturas de las nubes cambia, brindando cada segundo un hermoso cuadro, que a las personas soñadoras como yo, nos inspira enormemente.

Cómo si todo fuera posible, cómo si la auténtica inmensidad fuera más que apabullante estimuladora, cómo si con solo ver el cielo pudieras respirar aire más puro.