Como un globo.

Como un globo, nunca sabrás cuándo se disparará. Puedes verlo viajar por el aire, puedes verlo atravesar diferentes lugares. Pero no puedes vigilarlo todo el tiempo, porque eventualmente lo perderás de vista. A medida que pasa, desaparece lentamente.

No puedes evitar que vuele porque ya lo has liberado. Pero la pregunta es: ¿de verdad lo dejaste intencionalmente, o se deslizó accidentalmente?

Nunca puedes detener que un globo vaya a ninguna parte. Todo lo que puedes hacer es verlo volar y esperar que vaya a un buen lugar. Al igual que ver a otra persona irse.

No puedes detenerlos porque eso es lo que optaron por hacer. Y no puede simplemente pedirles que se queden porque si lo desean, nunca hubieran pensado en irse.