DOLOR SUFRIMIENTO Y MALDAD
¿Qué es el dolor, el sufrimiento y la maldad?
Entendamos primero, que nosotros los seres humanos, poseemos diversas clases de emociones o sentimientos que, de acuerdo al dominio que tengamos sobre ellos, podremos sentirnos de la mejor manera posible.
De acuerdo con esta información, el sentimiento del dolor, sufrir, y la maldad, pueden ser efectivamente controlados; conforme a nuestra convicción acerca de la vida. Si sabemos qué es la vida y cómo vivirla.
Sin duda alguna, es fácil hablar y hacer referencias a terceros, cuando no se está en el problema tal; porque problema seria, todo aquello que da como resultado el efecto no esperado que, de acuerdo a su magnitud y duración, la consecuencia de los sentimientos del dolor y la angustia (sufrimiento).
Es muy claro y obvio que la maldad se refiere, a todo efecto dañino que emprendemos hacia otro sin causa justa. Recordando que, la justicia es todo aquello que se hace en pro del bienestar de la persona sin hacer daño a terceros.
Ahora, ¿Cómo podemos controlar el dolor, el sufrir, y la maldad?
Bueno, todo va a depender en la forma ó en la manera de ver la vida; entendiendo por su puesto, que, la vida es el ser humano en sí, y por ende, tenemos que aceptar que cada ser humano es un mundo diferente al nuestro; aunque, en algunos puntos, tengamos similitud, pero no es igual.
Para entender la vida o las personas en sí, tenemos que estudiar al ser humano. De esta forma nos reflejamos en él y, por ende, una mejor comprensión de la vida. Esto no quiere decir que somos mundos iguales.
PUNTOS A TOMAR EN CONSIDERACIÓN
Algunos puntos a tomar en consideración acerca del estudio del ser humano, serian:
A) Indagar ó tratar de entender y aprender, los gestos de las personas y el de uno mismo; preguntándonos por cierto, las causas que originan tales acciones.
B) Cada vez que hago algo debo preguntarme, "por qué lo hago", y, que sentido de justicia existe en ello.
C) El por qué me siento, me paro; Por qué camino, me canso, etc.
Aparentemente los puntos anteriores, parecen algo locos, pero, no lo son.
Esto trae como consecuencia positiva, el familiarizarse un poco más con la humanidad, de lo que somos, de lo que hacemos, y el por qué de ello; Nuestros actos, hechos y dichos, la forma de sentir y hablar, pensar y analizar acerca de todo. Es una forma de ejercitar nuestro cerebro.
Debo aclarar que, estos ejercicios, no deben ejecutarse a diario, pues, producen agotamiento mental. Sin embargo, podríamos llevarlo a cabo, siete veces al mes.