"Proclamo en voz alta la libertad de pensamiento, y muera el que no piense como yo."
Voltaire

Mi grito de Libertad

“Proclamo en voz alta la libertad de pensamiento,…” ¿Quién en su juicio no tiene la necesidad de sentirte libre? Todos la tenemos, es un derecho el libre pensamiento, la libre acción aunque no sea del aprecio del otro, y es cuando prosigue “… y muera el que no piense como yo”, pero aquel que no comparta el principio del libre albedrío.

Para muchos la libertad tiene varias interpretaciones, todo va a depender en su mayoría del contexto familiar, social y hasta político.

Por lo tanto la libertad
Puede ser para mí una ventana
Pero para el otro una jaula
Y eso hay que respetar.

En lo familiar

Muchas parejas viven sumergidas en un irrespeto, que a los ojos ajenos parecen que se mantienen en una lucha de poder. El esposo no deja salir a la mujer y pensamos que no se siente libre. Aunque para ella, la libertad es vivir encerrada y tener todo dentro de su casa que la hace feliz a sabiendas que no puede salir. Pues ella eligió una jaula como abrigo de su libertad. No se puede llegar a pensar que ella no está bien porque no maneja el mismo concepto que tú o yo tenemos.

No todos tienen una venda
La libertad no es condicional
No se obliga a quien amar
En una pareja no debes opinar.

En lo social

Estamos cercados por un conjunto de normas que no permiten que seas el reflejo de tus pensamientos, por ende no puedes dar rienda suelta a tu concepto de libertad, pero aun tienes derechos de hacerte notar y también de aceptar, le llamamos respeto.

Una cosa es entender las normas
Otra de no refutarlas
Con el respeto que valga
Debo hacerme notar.

En lo político

La libertad de pensamiento está camuflada en los discursos de personalidades que dogmatizan a sus seguidores a punta de promesas, y si no piensas igual que ellos, estarás fallando al proceso. El libre albedrío a los ojos ajenos está desactivado y para los que están dentro, les regocija en el alma decir un sí, sabiendo que el hambre los ataca al llegar a sus casas. Los discursos políticos no persiguen el pensamiento de Voltaire, aquel que no piense igual debe morir en la clandestinidad social porque se convierte en un estorbo que no les permitirá avanzar. Terminas enajenado en tu sentimiento de querer luchar por su pensamiento de libertad, aceptando que no tiene por qué tener la razón, pero su derecho a refutar y a lograr una ventana lograda a una jaula impuesta le permite alejarse de una realidad que simplemente no comparte.

El político en su discurso
Te dibuja un paraíso
Te aniquila tus instintos
No puedes pensar distinto.

En el proceso del libre pensamiento, la tolerancia entra en acción. Tenemos que respetar las opiniones de los demás, rescatar muchos valores que se han perdido desde el hogar por la ruptura de muchas familias.

Al tocar este tema tan sensible a nuestro país en este momento, vemos como pisotean tan cruelmente el pensamiento de Voltaire. Las fuertes represiones contra un pueblo que proclama libertad de pensamiento, y que sabe que también hay unos pocos que refutan sus opiniones, son manifestaciones de un gobierno que quiera que muera todo aquel que no piense como él y literalmente es lo que están haciendo.

No hay represiones que borren la lucha
De un pueblo marcado por la desdicha
La muerte arropa a muchos hogares
El gobierno se cae por tantas verdades.

¡Abre tu jaula si no te sientes libre!

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