Tren de vuelta (Poema)

Cuando pienso en tus ojos comienzo mi viaje;
tomo el tren para ir rápido a buscarte
con mi corazón, sin más equipaje.

Cuando pienso en tu boca me pierdo en tus besos
tan dulces, tan tiernos, plácidos, serenos;
mi carne es tu carne, mi aire es tu aliento.

Cuando pienso en tu pelo me pierdo en tus rizos,
sumerjo mis manos mientras acaricio
el suave dorado de ese paraíso.

Cuando pienso en tu piel me siento en mi tierra;
parto de tu cuello, blanca primavera,
recorro tu espalda dejando mil huellas.

Cuando pienso en ti, llego a mi destino,
el tren se detiene, soy feliz y vivo.
Tomo mi equipaje que no ha de ser mío;
es tuyo, lo sé, tengo que admitirlo.

Pero cuando pienso en mi
irremediablemente hago transferencia:
de esta fantasía tierna a una realidad de ausencia…
Y se quedan tus ojos, tu boca, tu pelo y tu piel atados a mi
luego de tomar este tren de vuelta.

César Ignacio Millán Argüello

[Fuente]: 1.bp.blogspot.com/_Hi1_E_dvBBw/TIWN0jDHvpI/AAAAAAAAC3g/xHyVdAvLczY/s1600/tren-bala.jpg