Mi experiencia en un edificio abandonado: Torre de David [Parte 2]
En la anterior parte de este post, les comentaba un poco sobre la historia de este edificio, desde que lo construyeron hasta el momento en que fue ocupado por familias sin hogar y posterior abandono.
En el año 2015 fue desalojado el edificio y actualmente se encuentra abandonado. Les comenté que en esta segunda parte del post, les mostraría una serie de fotografías que pude sacar del lugar, ya que a principio de año tuve la oportunidad de adentrarme a este edificio.
Mi experiencia en un edificio abandonado: Torre de David [Parte 1]
¡Vamos allá!
Actualmente el edificio se encuentra abandonado y antes de entrar, le pude tomar estas fotografías desde afuera. Así luce actualmente el edificio desde fuera:
Como pueden ver, el edificio tiene muchas ventanas rotas, producto de que ha sido vandalizado. Como pueden ver, se ven las viviendas que las familias construyeron dentro del edificio. Algo increíble.
Para acceder al edificio, tuve que entrar por el estacionamiento el cual tiene unos 14 pisos. La ventaja es que se puede subir por medio de unas rampas las cuales no representan peligro alguno.
Aquí les dejo una imagen de como luce el estacionamiento, aunque no es de mi autoría, ya que no le saqué fotos a ese lugar. La foto es antigua, de cuando estaban los habitantes en la torre:
Fuente: veonoticia.com
Lo curioso, es que desde el estacionamiento tienes acceso a los pasillos que dan a los apartamentos. Cuando subí yo, esos pisos estaban clausurados.
Por otro lado, se contaba que había un servicio de mototaxi que subía a los habitantes que vivían en los primeros pisos hasta el último del estacionamiento.
A medida que vas subiendo por las rampas, puedes ver cosas como estas:
Cuando llegué a la última planta del estacionamiento, se podía ver la torre y un pequeño edificio de 8 pisos que en realidad eran escaleras que conectaban hacia los apartamentos. Por ahí fue donde me dispuse a subir y conocer el interior de la torre:
Subir por esas escaleras fue una tortura constante. No tenían ningún tipo de agarradera o algo por el estilo que diera seguridad. Además de que los escalones tenían muchos escombros y existía la posibilidad de resbalar con alguno.
En este punto no tomé fotografías de las escaleras y debo hacer uso de imágenes de la web. Tengo que admitir que el vértigo no me permitía concentrarme en nada más que no fuera concentrarme para no resbalar. Jaja
Fuente: iwan baan
Esta imagen es antigua. Actualmente se encuentra más descuidado y con muchos escombros por todos lados. Lo más curioso es que por las paredes del lugar, podían verse cantidad de carteles pegados, en los cuales encontrábamos servicios desde peluquería, guardería o incluso advertencias de no botar basura, contaban con ciertos mensajes políticos.
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Subiendo por las escaleras, podíamos encontrar los pasillos que esta vez sí, conectaban con los apartamentos y no estaban clausurados.
Daba cierto temor porque nuevamente no contaba con ningún tipo de seguridad aquella especie de puente y por los lados se veía solo caída. Yo la verdad es que no quise asomarme mucho.
Cuando entré a los apartamentos, corría una brisa fría y se podía ver todo muy oscuro pese a tener un día muy soleado y bonito afuera. Aquellos pasillos que daban hacia los apartamentos, se hallaban en una oscuridad total y un silencio sepulcral, solo roto por los ocasionales sonidos del viento y uno que otro escombro que chocaba con las paredes.
Siempre tuve la inquietante sensación de que alguien iba a salir de alguna de las puertas, y no hablo precisamente de un fantasma (hasta prefería encontrarme alguno), sino de alguien que realmente se haya quedado escondido ahí o algo por el estilo.
Los pisos eran enormes, podían haber hasta 24 apartamentos por cada planta no se si más, pero aquello me parecía enorme. En cuanto a los apartamentos, algunos parecían ser algo pequeños.. muchos escombros y ropa eso sí. Aquello parecía que hubiese ocurrido alguna catástrofe ahí:
Incluso, se podían ver algunos mensajes grabados en las paredes.
Recuerdo que en las zonas más centrales del piso, estaba muy pero muy oscuro. Incluso habían habitaciones que ni siquiera tenían piso. Por lo cual era un peligro adentrarse sin tener una linterna a la mano. Yo por mi parte me llevé un buen susto con esta habitación, puesto que quería entrar a tomar fotografías pero ante el miedo de la oscuridad (los instintos hicieron bien su trabajo) decidí no entrar y tomar una foto con flash antes:
Luego, al llegar al piso 18, ya no podía seguir subiendo puesto que hasta ahí llegaban aquellas infernales escaleras sin agarraderas. Lo que no sabía, es que me esperaban unas escaleras que si bien estaban más protegidas, puesto que estaban en un entorno cerrado, aquellas escaleras estaban totalmente oscuras. Sin luz, con muchos escombros y para colmo solo contaba con una tenue luz de celular para iluminar el camino. Esas escaleras nos guiarían hasta la última planta. Es decir, hasta el piso 45 donde se encontraba el helipuerto. Subir por ahí fue toda una aventura.:
A medida que subía por aquellas escaleras tan oscuras, más era la sensación de que alguien podía aparecer (jajaja siempre fue mi miedo durante todo el trayecto) Sin embargo, dichas escaleras daban accesos a más pisos en ruinas, cada vez la cosa parecía ponerse más fea y abandonada.
Hasta que al fin llegué tras un buen rato subiendo, a ese helipuerto en el último piso. Las vistas de la ciudad eran increíbles. Llegar ahí hizo que valiera la pena subir todos esos pisos. Llegar ahí fue liberador. Tras tanta oscuridad y abandono, había llegado la luz y la belleza.
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Pues nada amigos, hasta aquí finaliza mi aventura en este increíble lugar. La verdad que fue una experiencia genial, ya que experimenté miedo, adrenalina en algunas ocasiones y sobre todo una sensación de liberación y satisfacción cuando llegué a la cima.
Pero sobre todo vi y sentí de primera mano que se sentía estar dentro de aquella torre. Y pensar que muchas familias tenían que subir esas escaleras a diario, pasar por tantos peligros, porque ciertamente la torre no era apta para vivir. Entendí muchas cosas ese día. La verdad que fue una experiencia increíble.
Este mensaje lo encontré cuando iba de bajada, casi llegando a la salida. Me pareció interesante (más allá del error):
A día de hoy, la torre sigue abandonada y cada día se va deteriorando más. Sin embargo aún dentro de su interior se hayan los recuerdos de las miles de familias que alguna vez lo habitaron.
La torre de david en si misma es un fantasma gigantesco que está a la vista de todos día tras día, oxidándose bajo el inclemente sol.
Espero les haya gustado el post, amigos.
¡Nos veremos en siguiente post!
- Lxs
Yo quiero entrar. Que lugar tan increíble.
Es una experiencia genial, de verdad te la recomiendo.