Un cambio de ruta inesperado

francyrios75 (67)in #photography • 5 years ago

Saludos queridos amigos y amantes de la fotografía

Todos en algún momento, han planificado alguna actividad, viaje, encuentro, etc., y a la final el destino hace de las suyas, no resultando las cosas como las planeamos, este fin de semana revisando mi fototeka, encontré unas fotografías que me hicieron evocar recuerdo, en torno a este tema. Se trato de una ocasión en que, durante un viaje, a mi familia y a mí, nos tocó, hacer un cambio de ruta inesperado, fue toda una odisea, sin embargo, en un momento que nos pudimos detener, logre tomar las fotografías que les iré compartiendo, mientras le cuento toda nuestra travesía.

Como todos saben, los que aun vivimos en Venezuela, no la estamos pasando nada bien y son muchas las vicisitudes que padecemos día a día, por lo que, para nosotros la palabra planificar, prácticamente ha perdido todo tipo de sentido. En Venezuela es casi imposible llevar a feliz termino algún tipo de planificación, siempre sale un imprevisto que nos obliga a usar el plan “B”, el “C”, el “D”, el “E”…, en fin, que les puedo decir.

El caso es, que hace poco mas de dos años, veníamos de regreso de visitar a mis padres en la ciudad de Carúpano, estado Sucre. Como mi familia y yo residimos en Barcelona estado Anzoátegui, para llegar a nuestro hogar, la ruta normal recorre la carretera nacional denominada troncal 9, es un viaje que en condiciones normales dura aproximadamente 4 horas, de las cuales, la mayor parte, es a través de la línea costera de los estados Sucre y Anzoátegui. Es un recorrido realmente hermoso, donde también se encuentran numerosos pueblitos, y caseríos, sin embargo, debido a la crisis actual venezolana, estas poblaciones en su la mayoría, por no decir todas, la están pasando muy, pero muy mal, por lo que, prácticamente a diario trancan la carretera nacional, ya que, es el único medio que poseen, para hacer visible su precaria situación.

Bueno, en esa ocasión, a pesar de que habíamos salido de Carúpano a tempranas horas de la mañana, tratando de prevenir quedar atrapados, por estar cerrada la carretera, no tuvimos suerte, y a cierta altura del recorrido nos encontramos con la gran tranca. Esperamos, esperamos y esperamos… al indagar entre nuestros “compañeritos de tranca”, descubrimos las aparentes razones de la misma. Después de meditar, a cerca de nuestras opciones, porque, definitivamente el esperar que abrieran la carrera no era una, ya que, nos encontrábamos en medio de la nada, con nuestras dos hijas, que, para ese momento, la mayor contaba con 7 años y la menor era una beba de aproximadamente 6 meses. Así que, no nos quedaba otra opción, que encender el GPS y buscar una ruta alterna para poder continuar nuestro recorrido, porque regresarnos a Carúpano, tampoco era una opción, ya que teníamos compromisos laborales que nos esperaban, al día siguiente, en la ciudad de Barcelona.

La única opción implicaba, dar la vuelta y recorrer en sentido contrario, hasta llegar a un desvío que habíamos pasado unos cuantos kilómetros atrás y que nos permitía entran a la vía que conduce al pueblo de Caripe. Este es un trayecto en que casi todo el tramo antes de llegar a Caripe corresponde a vías que se adentran en la montaña, igualmente, buena parte del tramo que se recorre desde Caripe hasta la ciudad de Maturín. Si bien, el recorrido también es muy hermoso y el clima mejora mucho, lo cual me encanta, porque al tratarse de zonas de montaña, el clima es muchísimo más fresco. El problema, es la carretera, la cual, es bastante peligrosa, por la cantidad de curvas, el pésimo estado por falta de mantenimiento, además, de ser muy angosta en algunos lugares, incluso, hay trechos, que prácticamente solo puede pasar un auto a la vez, por lo que, se debe rogar, de no encontrarse a nadie que venga en sentido contrario.

Lo peor, de este inesperado cambio de ruta, era que agregaba, más o menos 6 horas más al recorrido, ya que debíamos adentrarnos en el estado vecino de Monagas, recorrer una parte de él, para volver sobre nuestros pasos por una vía distinta y finalmente llegar a la ciudad de Barcelona, por lo que nuestro viaje, paso de durar 4 horas a más de 10 largas e interminables horas continuas de carretera. Gracias a Dios, el carro y mis hijas se portaron a la altura, ya que, después del cambio de ruta, solo hicimos dos pequeñas paradas, la primera fue, en una zona que queda poco antes de llegar a la cueva del Guácharo en el Pueblo de Caripe, lugar donde tome las fotografía que hoy les comparto y la segunda, ya fue, en la ciudad de Maturín en una parada de carretera, donde al fin pudimos comprar algo ligero para comer y beber, e ir al baño. Para finalmente retomar, nuestro viaje rumbo a nuestro destino final, la ciudad de Barcelona, a la cual, llegamos gracias a Dios, sanos y salvos, pero muy cansados.