Un buen día
Hoy fue un muy buen día, me siento bastante bien y estoy contento por eso, y más que nada porque lo que sucedió ayer me hizo ponerme a pensar.
Es que ¿por qué tengo celos de esa persona? y la respuesta fue “¿Por qué él tiene éxito y yo no? ¿Por qué yo sigo creando proyectos y todos fallan? ¿Qué tiene él que yo no tenga? ¿Qué estoy haciendo mal?”
Y claro todo eso viene desde mi miedo sobre todo del “¿Lo voy a lograr?” ¿Voy a lograr cumplir mis sueños?” y obvio ver a alguien más cumplir los suyos me duele y es por eso que tengo esa sensación agridulce de que estoy súper contento por la persona pero al mismo tiempo me siento triste por mí.
Y mira aceptar esto no es fácil, sobretodo porque me juzgo mucho y digo ¿quién soy yo para estarme quejando? ¿con que cara me puedo sentir triste por mí mismo si tengo más que otros? Y obvio el clásico “se supone que eres una buena persona y deberías estar feliz por los otros y siempre buscar lo mejor por los demás”.
Entonces hoy me di espacio para poder sentir eso. Me permití sentir esa tristeza, dolor, ira y envidia y fue un momento bastante lindo. Por un momento sentí como que en verdad me amaba y en verdad me aceptaba. Sentí que estaba bien ser yo y estaba bien sentir lo que sentía.
Y sabes ahora escribiendo esto, me doy cuenta de que todo este proceso es como lo que viven las mariposas, y a la final siento que ahorita soy una oruga y no tengo idea de cuando va a terminar todo este proceso y tampoco tengo idea de la persona en la que me voy a convertir. Pero por lo menos hasta ahora me gusta bastante todo lo que he logrado.