La altura a sí misma atrae.

Que en la vida de algunas personas es
Desvergonzada sabana de amapola, enrojecimiento de nuestros caminos.
Eres esa experiencia dulce, agridulce.
Destruir a todos los seres vivos es calentar.
Su pequeño mundo.
Lavar la estación entre las líneas de las pistas.

La imposibilidad de las noches pecaminosas...
Y deberías empezar tú mismo.
Beso suave en los labios, cuello, sienes.
Por la corteza significativa
Cuantos de los que no ven nada
Así que viste cómo es la gente.

Nos extraña que la decisión de Cristo.
En su cama fria
Jugando en las estrellas de nieve azul.
Muy a menudo queremos volver a una infancia feliz,
Poco a poco, poco a poco, llegué
No hay ni tumba ni cripta.

Taza borracha
En su cabeza...
En un cuarto tapado, encerrado.
En este viaje, todos me traicionaron,
Y la fe en lo mejor, en todo es irreversible.
Y que vivan felices y bellamente.

Tormenta de arena se convertirá.
¡Mi gato tiene un genio feroz!
Y los copos de nieve vuelan, kamikaze malvado de ojos blancos
Nadó hasta el amor del fuego...
Si no importa lo duro que intentes o sufras.
La gente la aprecia tanto.

Ni siquiera pudimos conocerte en persona:
Perseguir los problemas de la vida, privar de cargas humanas.
Y en ventiscas, y en una terrible tormenta.
Hoy eres mía y es inevitable.
Sirviendo como un santuario para las almas cubiertas de nieve.
Ámalos por todas las palabras.