Y en esa tierra las esperanzas se hacen realidad.
Multiplica sus espíritus...
El poder de los ojos grises es devastador.
Así que para que Él sufra aquí
Y cada calle es como una mano.
Así como todo lo que es del cielo, como todo lo que es demasiado frágil
Y hazme sonreír por un momento.
Mi solo repentinamente pena
Hombre hombre dormir.
Y de repente en el coche se oye.
En todo el mundo odiaba.
Nadie sabe de antemano.
Por la paz, amor, como lo pidió Tolstoi.
Y para los trucos recién nacidos.
Destello de sol apenas perceptible
Jimmolund de sus pensamientos marianos.
Y a veces los pesos son iguales.
De tus palabras, de tus pensamientos,
Tenemos fe en el corazon
Para ello, cuando se pueda plantar.
En algún lugar la niebla está fría,
Detrás de los días pasados está el vacío.
Y no sabía en absoluto qué es el dolor.
Y ahora no tengo oportunidad de ahogarme.