¡Hola a todos, queridos Stemians! En este post les comentaré acerca de un hecho increíble y relativamente reciente que quiero compartir con todos ustedes.

¡Veamos!

Desde 1980 en Venezuela se han estado llevando a cabo una serie de investigaciones con el fin de revelar parte de la historia de la fauna en nuestro territorio, incluso desde la época jurásica, el centro de estos estudios fue el estado Táchira, lugar que hace aproximadamente 200 millones de años, fue el hogar de las dos primeras especies validadas por la paleontología en Venezuela.

En un primer momento, investigadores franceses hallaron en 1992 restos de fósiles en la Formación La Quinta que clasificaron erróneamente como "Lesothosaurus sp." (un dinosaurio propio de Sudáfrica) dado que el espécimen contaba con rasgos muy similares a los del dinosaurio venezolano.

¿Lesothosaurus gritensis?

Sin embargo, luego de dos décadas de excavaciones y estudios, en el 2014, los investigadores alcanzaron las conclusiones que esperaban. En agosto del mencionado año se conoció que los restos hallados en 1992 corresponden a una especie única, nunca antes descrita a la que se nombró Laquintasaura venezuelae, en alusión al descubrimiento de estos fósiles en la región La Quinta (Táchira). Y un mes después se hizo pública que otros fósiles, ubicados en la misma zona, revelaban la coexistencia de la especie anterior con el Tachiraptor admirabilis, otro tipo de dinosaurio también nuevo para la ciencia. Este descubrimiento incluyó a Venezuela en el registro de países que cuentan dinosaurios propios, la cual suma alrededor de 800 variaciones del animal más grande que existió.

El biólogo venezolano-argentino Marcelo Sánchez, fue el coordinador del grupo internacional de seis investigadores que dieron el nombre al herbívoro Laquintasaura venezuelae, la nueva especie del orden de los ornitisquios, descrito como un dinosaurio hervíboro del periodo jurásico temprano, de aproximadaente 201 millones de años de antigüedad, clasificado entre los más primitivos de su grupo, debido a que el decubrimiento demostró la convivencia en grupos de esta especie.

Tachirenses Jurásicos

Laquintasaura venezuelae

El Laquintasaura ha sido descrito por los investigadores como un dinosaurio pequeño, con aproximadamente un metro de altura, que caminaba sobre sus patas traseras, siendo capaz de alcanzar grandes velocidades. Su alimentación consistía en helechos, aunque la forma de sus dientes puede indicar la posibilidad de que podría haber comido insectos. Su peso máximo podía alcanzar los 15 Kg, y poseía cuerpo con forma de barril, cola extensa, cabeza alargada y boca angosta.

”Los fósiles fueron recolectados por mi persona en 1992 y, luego, en 1994.”
– Marcelo Sánchez.
Fuente

Marcelo Sánchez

El Tachiraptor admirabilis (compañero del Laquintasaura) es el primer dinosauro carnívoro del cual se tiene registro en Venezuela, y cuyos restos fueron hallados por un equipo de trabajo del investigador Ascanio Rincón, perteneciente al Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC).

Tachiraptor admirabilis

“El Tachiraptor apareció en la transición del Triásico – Jurásico cuando aparentemente hubo una extinción masiva. Hay pocos dinosaurios de esa edad en el mundo, por lo que este descubrimiento nos permite estar en el escenario internacional diciendo que la palentología venezolana reescribe la evolución de los dinosaurios en esta parte del mundo desde el punto de vista científico y también enriquece el patrimonio de la nación”, explicó Rincón.
Fuente

Ascanio Rincón, investigador del IVIC

Las investigaciones han precisado algunas características del Tachiraptor, dando a conocer que se trataba de un dinosaurio bípedo relativamente pequeño y de aproximadamente 1, 5 metros de largo de la nariz a la cola, netamente carnívoro debido al resultado del estudio de la osamenta encontrada, esencialmente la pelvis, señalan los científicos.
La información oficial publicada en Londres explica que esta especie forma parte del árbol evolutivo de los carnívoros, junto a especies que poblaron la tierra hace alrededor de 200 millones de años, como es el caso del Dilophosaurus (descubierto en Arizona, USA) y el Cryolophosaurus (hallado en la cordillera antártica).

Para todos los que deseen y tengan la posibilidad de visitarlos, este par de “tachirenses jurásicos” cuentan con un lugar especial en la exposición permanente “Memorias de la Vida”, en la sala 5 del Museo de Ciencias, en Caracas, Venezuela.

Bueno, queridos Stemians, esto ha sido todo. Interesante, ¿cierto? Espero que mi post haya sido de agrado para ustedes y gracias por haber tomado parte de su tiempo para leerlo :D Si les gustó pueden hacérmelo saber con sus comentarios ;) Como siempre, me despido desde mi hermosa Venezuela, mi país jurásico :)

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