Concurso de Microrrelatos de Terror #MicroTerror256 - Semana 3 - Abominación

Cada vez que veía el espejo le parecía que no era su reflejo. Un pequeño gesto, un guiño, una arruga más de las que su cara tenía… algo era diferente, pero no podía dejar de verlo intentando saber qué. Día tras día era más notoria la diferencia; sí, era su cara, pero había un gesto perverso, una sombra en la mirada, una intuición de maldad que no le dejaba descansar hasta que supiera de qué se trataba. Ese día la inquietud le asaltaba a cada momento, no lograba concentrarse en su trabajo pensando en el espejo y su reflejo que se burlaba socarrón. Si tan sólo supiera por qué… Esa fue otra noche igual a tantas, viendo a su otro yo, a ese reflejo en el que se veía sin reconocerse. Otra vez la claridad del amanecer le sorprendió en el baño, pero esta vez algo era diferente… Su reflejo, con su gesto malicioso, terminaba de acicalarse. Entonces lo supo, estaba atrapado al otro lado del espejo y nadie lo volvería a ver, sólo su abominable reflejo que volvía cada noche más burlón, a recordarle que ahora era dueño de su vida.