Concurso de Microrrelatos de Ciencia Ficción #MicroCiFi256 - Semana 3 - La noche eterna
Evolución
La línea entre lo humano y lo divino es tan delgada que hoy en día las personas juegan a ser Dios.
Cuando tenía cinco años mi padre me obsequió mi primer robot de juguete, estaba tan emocionado que comencé a coleccionar estos personajes; con el transcurrir del tiempo pude adquirir modelos más sofisticados y muchas de esas piezas eran únicas, dignas del mejor coleccionista.
Como la tecnología crece, lo extraordinario se convierte en cotidiano, así sucedió con la humanidad, la inteligencia artificial comenzó a dominar y a reescribir leyes y derechos entre los humanos y la robótica que se proyectó y comenzó a reclamar su posición, se perfeccionaba cada vez más y dentro de poco sería muy difícil diferenciar lo real de lo artificial.
La tecnología marcó una nueva etapa, se habla de integrar elementos cibernéticos en nuestro cuerpo supliendo la ausencia de nuestras partes, sea por necesidad o por simple gusto; seremos capaces de sustituir por completo los cuerpos biológicos para albergar un frío caparazón metalizado; igualmente sucederá con nuestra conciencia; suena descabellado trasplantar una memoria y sentimientos en una máquina; la idea es emocionante, pero a la vez genera un profundo miedo que un robot esté integrado en algún núcleo familiar.
Hoy mi mente no es tan lúcida como hace 20 años atrás; me encuentro en mi ocaso del día, contemplo los atardeceres como si fuera el último junto a mi única compañía que es esa robot de hermosa belleza quien me acompaña cada noche eterna que aguarda por mí.
Concurso de microrrelatos de ciencia ficción #MicroCiFi256 - Semana 3 - La noche eterna
Buen relato amiga, suerte en el concurso.;)
Gracias amiga por visitarme, saludos y suerte para tí también!
excelente amiga!
muchas gracias @williamjose
exitos en el concurso!
Muchas gracias amiga!
Triste que al final sean solo máquinas las que nos terminen cuidando. Suerte en el concurso @edurley ;)
Gracias amigo igualmente para ti, es una posibilidad y ya no es un sueño tan lejano.
De cuidar robots con celo en la infancia, terminó siendo cuidado por una robot. Yo colecciobaba legos en mi niñez; espero no ser cuidada por un muñeco lego con inteligencia artificial. Exitos en el concurso amiga.
jajajaja muchas gracias amiga por tu valioso comentario. igualmente mucho éxitos para ti también!