Prefiero  estar  en  los brazos  de la  muerte...  probablemente.

Los pensamientos pululan y trepan debajo de la piel,
Me meto en una mochila de vino de oporto y cigarrillos.
Ella es la corona de nuestra vida
La luz del sol saldrá de detrás de las nubes.
Y alguien está ahí en la ventana.
Pero entre tus costillas.

Siéntate a la mesa y no te muevas!
Pero no lo niego, no lo niego.
¿Cómo podría no esconder el vacío?
No aquel cuyo dinero es más rico.
Lo que miro a través del prisma de la ropa brillante.
Cuántos días grandes y pequeños.

Buscando tu adrenalina.
Enamórate de una nueva manera.
Todo es empalagoso, gentil.
Los sentimientos son ajenos a todos los cánones.
Yo diría, él tomaría, muy rápidamente, lejos
¿Has visto una ballena? ¿Es enorme?

Alrededor de ningún alma. El mundo entero está tranquilo.
Muerto en una sociedad ruidosa
Aunque ¿qué más me queda?
Paz todo el día a sus ovejas rizadas.
Mi voz ronca de tenor a barítono.
Hierba esmeralda, brocado crujiente.

Pero lo intento te amo
¡Que es un momento momentáneo para el olvido y el perdón!
El lado negro salió y la guerra comenzó sin el bien, pero solo por cálculo.
El perro desafortunado murió.
Torturando el veloz curso de los años.
Tal vez el fin pronto.. luz..

El punto no está en los nombres.
Así que todos susurraron, con una ceja inclinada.
Pat en el hombro del paciente.
¿Y entonces el libro dará cupones?
Me escribes, amor, sobre el ascenso desde el alféizar de la ventana.
El tiempo, como si de inspiración.