Mi título es algo fuerte, pero es algo que me lleva dando vueltas hace un tiempo ya en la cabeza. Soy de esas personas que se sienta y medita, con cabeza fría, para darle respuestas algunas incongruencias, capaz me ahogo en un vaso de agua, pero me pareció interesante. Bueno como decía mi dermatólogo, vamos al grano, el egoísmo y la felicidad, para mí son dos elementos que van de la mano, a pesar de que tengamos la felicidad personal y la compartida.

Pero antes de seguir avanzando debemos tener claro que es el egoísmo:

” Inmoderado y excesivo amor a sí mismo, que hace atender desmedidamente al propio interés, sin cuidarse del de los demás.”

Bueno como bien nos dice la rae, el egoísmo es ese amor excesivo por nosotros mismos, el cual nos ciega, impidiendo que veamos y velemos por los intereses de los demás. Teniendo claro que es egoísmos, ahora hablamos de la felicidad:

”Estado de grata satisfacción espiritual y física.”

Ya sabemos que la felicidad contempla dos aspectos importantes como lo son el emocional y el físico. La felicidad es algo sumamente subjetivo, que quiere decir esto, que depende de cada quien, y de que realmente lo haga feliz, por ejemplo: hay personas las cuales son felices comprando cosas, simplemente las cosas materiales los hacen felices, mientras que otras son felices compartiendo con amigos, saliendo, teniendo pareja o cumpliendo poco a poco sus objetivos de vida, y así…cada quien es feliz a su manera.

Es por esto que planteo el tema a discusión ¿la felicidad es egoísta? yo diría que sí, me explico, las personas no serán felices por nosotros, un padre o una madre, inclusive amigos o familiares, pueden llegar a estar feliz hasta cierto punto, por nosotros, y eso está bien. Pero pensándolo bien, y ¿nosotros? No necesariamente esas personas que pueden estar felices por nosotros, quiere decir que nosotros lo estemos. Es por ello cuando digo, que nadie mejor que nosotros mismos para saber que nos hacer realmente felices, y como apostar por ello para conseguirlo. Muchas veces pensamos mucho en hacer ciertas cosas que queremos, solo cuando nos detenemos a pensar no solo en nuestra felicidad si no en la de los demás, y eso no está mal, pero si realmente quieres ser feliz y estar cómodo contigo mismo, debes ser feliz a tu manera, claro nunca soltando la mano de las personas que te rodean, es cuando sale esa frase de “dedicarse un tiempo a uno mismo”, la cual no está herrada.

En conclusión 

Nadie será felices por nosotros, ni la felicidad de nosotros hará plenamente feliz a nadie, cada quien tiene su concepto y su manera de alcanzar la realización personal, siendo feliz y haciendo lo que les apetece. Es por eso que antes de limitarte por pensar en alguien, piensa por un momento en ti, y que estas arriesgando y si eso tendrá su recompensa, sin lastimar a nadie claro está. Ya que cuando hay personas que se interponen entre lo que nos hace feliz y lo que queremos, sortearlas de la manera correcta es la clave para no solo ser felices si no, no provocar un daño que a la alarga dañe a propios y extraños.

Bibliografía: http://www.rae.es/
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