Mi historia de amor
:
Aquí te dejo esta pequeña reflexión la cual viví y aprendí mucho de ella espero te sirva de algo a ti también.
A finales del año 2016 en la ciudad de cantaura del estado anzoategui para ser exactos en el mes de julio. Afrontamos una situación tremenda en nuestras vidas: escases de alimentos falta de empleo, con tres niños pidiendo de comer y no tener que ofrecerles nos vimos obligados a mudarnos al estado vargas de nuestro mismo país Venezuela, misma situaciones pero con un poco mas de esperanzas para un porvenir.
Pronto Dios comenzó a bendecirnos en ese lugar ya instalados mi esposo consiguió empleo, conseguimos alquiler. pero algo que impacto mi vida fue el lugar que Dios me había reservado en ese lugar; después de tres meses conseguí empleo, un lugar el cual marco mi vida en una casa llamada Madre teresa de Calcuta.
Entusiasmada por el trabajo y la remuneración que obtendría al pasar la puerta y mirar mi responsabilidad en el lugar, cual seria mi función allí. el primer día fue sorprendente para mi se trataba de niños en condiciones especiales, desnutrición severa, parálisis cerebral,macro cefalea, autismo entre otros. me toco con los niños de 0 a 12 años de edad.
Al momento no sabia ni como alimentarlos o como saberlo si no podían decir lo que sentían, pasadas las semanas y meses poco a poco fui conociendo individualmente a cada uno de ellos: OMAR, Wilker, Daniel, Abrahan, Yender, Dannelis, Adrianny, Yaniluz, y mi YULI; cada uno de ellos de manera particular se adueñaron de mi corazón después de no saber nada de ellos solo con verlos sabia cuando tenían fiebre o simplemente tenían hambre, estos nueve niños cambiaron mi manera de ver las cosas a valorar la salud que Dios a puesto en mis hijos a darle gracias por los alimentos que nos provee a diario y que no importa que tengas poco puedes dar mucho mas de lo que tu mismo puedes pensar, que pueda que no seas la persona mas adinerada pero eres la persona necesaria para llevar amor a aquellos menos favorecidos, siempre va a ver alguien menos favorecido que tu y que a de necesitar tu favor no te niegues ante este porque quizás para ese momento fuiste llevado a ese lugar. Por diez meses el señor me permitió estar al lado de estos nueve los cuales hoy considero parte de mi experiencia de vida cada momento al amanecer les recuerdo y medito en cuantos mas como ellos estarán necesitando de mi hoy día
A finales del año 2016 en la ciudad de cantaura del estado anzoategui para ser exactos en el mes de julio. Afrontamos una situación tremenda en nuestras vidas: escases de alimentos falta de empleo, con tres niños pidiendo de comer y no tener que ofrecerles nos vimos obligados a mudarnos al estado vargas de nuestro mismo país Venezuela, misma situaciones pero con un poco mas de esperanzas para un porvenir.
Pronto Dios comenzó a bendecirnos en ese lugar ya instalados mi esposo consiguió empleo, conseguimos alquiler. pero algo que impacto mi vida fue el lugar que Dios me había reservado en ese lugar; después de tres meses conseguí empleo, un lugar el cual marco mi vida en una casa llamada Madre teresa de Calcuta.
Entusiasmada por el trabajo y la remuneración que obtendría al pasar la puerta y mirar mi responsabilidad en el lugar, cual seria mi función allí. el primer día fue sorprendente para mi se trataba de niños en condiciones especiales, desnutrición severa, parálisis cerebral,macro cefalea, autismo entre otros. me toco con los niños de 0 a 12 años de edad.
Al momento no sabia ni como alimentarlos o como saberlo si no podían decir lo que sentían, pasadas las semanas y meses poco a poco fui conociendo individualmente a cada uno de ellos: OMAR, Wilker, Daniel, Abrahan, Yender, Dannelis, Adrianny, Yaniluz, y mi YULI; cada uno de ellos de manera particular se adueñaron de mi corazón después de no saber nada de ellos solo con verlos sabia cuando tenían fiebre o simplemente tenían hambre, estos nueve niños cambiaron mi manera de ver las cosas a valorar la salud que Dios a puesto en mis hijos a darle gracias por los alimentos que nos provee a diario y que no importa que tengas poco puedes dar mucho mas de lo que tu mismo puedes pensar, que pueda que no seas la persona mas adinerada pero eres la persona necesaria para llevar amor a aquellos menos favorecidos, siempre va a ver alguien menos favorecido que tu y que a de necesitar tu favor no te niegues ante este porque quizás para ese momento fuiste llevado a ese lugar. Por diez meses el señor me permitió estar al lado de estos nueve los cuales hoy considero parte de mi experiencia de vida cada momento al amanecer les recuerdo y medito en cuantos mas como ellos estarán necesitando de mi hoy día