Teatro, música y libertad: ¡Bienvenidos a mi vida!
Siempre me ha resultado curioso el cómo las personas tienen tanta facilidad para hablar y escribir de otros, pero les cuesta tanto hablar de sí mismos, quizá temen que el resto del mundo conozca sus miedos, tropiezos y posturas. Y es totalmente normal viviendo en una sociedad tan llena de críticas, etiquetas y máscaras; todos hemos temido en algún punto expresarnos tal cual somos, y como ya yo no temo ser quien soy, aquí les va un extracto de mi corta –pero feliz- vida.
Mi vida siempre ha sido inspirada por la música y el arte en general, incluso antes de nacer. Una noche de mayo, faltando dos meses para mi nacimiento, mis padres se encontraban escuchando música vieja al calor del café, cuando la canción “Donna” de Richie Valens comenzó a sonar…
“Oh, donna, oh donna. I had a girl, donna was her name”
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Aunque parezca increíble, mi nombre (Dhanna), fue inspirado por esta canción pues a oídos de mi madre, cuando Richie Valens cantaba “oh, Donna. Oh, Donna” se escuchaba “Oh, Danna. Oh Danna” y decidió, junto a mi padre, que me llamaría Dhanna. No sé con certeza si el origen de mi nombre tenga algo que ver, pero me considero totalmente adicta a la música del siglo pasado. Janis Joplin resulta un vicio muy fuerte para mí. En realidad toda la música de los años 60’s es mi adicción; quizá se deba a mi amor por la libertad… o tal vez mi amor por la libertad se deba a mi gusto musical.
Siempre he pensado que la música es ese lenguaje que nos une a todos, esa nave mágica que es capaz de transportarnos a cualquier época que queramos. Al igual que el teatro, me encanta tanto el teatro que no sé decir cuál es mi cosa favorita en el mundo: ¿El teatro o la música?
Mi vida ha estado rodeada por el arte desde que nací. Mi abuela materna es actriz de teatro y televisión, su nombre es Romelia Agüero, muy conocida en Venezuela, mi país. Mi abuelo materno también fue actor de teatro y televisión. Mi madre igual. Mi tía igual. Mi tío igual. Definitivamente eso de que “el arte se lleva en las venas” debe de tener algo de verdad, porque por si no se lo esperaban, yo también soy actriz de teatro. Específicamente de teatro musical. Sí, también canto.
No hay momento en que me sienta más libre y más yo, que estando sobre un escenario. No importa si es grande o pequeño. No importa cuántos espectadores tenga delante de mí, simplemente me encanta todo lo que conlleva hacer esto: los nervios minutos antes de salir, las mariposas en el estómago, los aplausos… sentirte vulnerable delante de tantos desconocidos; todas estas cosas me hacen querer estar sobre un escenario por el resto de mi vida, porque me impresiona el cómo algo, durando tan poco, puede hacerte sentir realmente eterno.
Aquí les dejo un extracto de una de mis presentaciones musicales, en la que interpreté a ‘Úrsula’ de La Sirenita.
En mi casa se respira muchísima paz y amor. Vivo con mis padres y a pesar de que soy hija única, jamás me han faltado hermanos para jugar pues tengo 24. Sí, leyeron bien la cifra. Tengo veinticuatro hermanos. Aunque déjenme decirles que no son hermanos comunes y corrientes: tienen cuatro patas y cola. “¿¡Cómo es esto posible!?” Déjenme explicarles. Mi padre se ha dedicado a rescatar animales callejeros prácticamente toda su vida. Heredé la vena artística de mi madre, pero de mi padre heredé su gran amor por los animales.
En casa tenemos 15 perros y 9 gatos, cada uno con una particular historia (alguna más triste que otra) pero todos con un final muy feliz. Mi mamá, mi papá y yo nos dedicamos a rescatar animales abandonados o en peligro y los cuidamos hasta que logramos conseguirle hogar; pero en muchas ocasiones no hemos podido conseguirle una familia a alguno de ellos así que terminan quedándose en casa ¡y es así como hemos llegado a la increíble cifra de veinticuatro mascotas! Definitivamente tuve una infancia privilegiada. Mientras muchos niños ruegan a sus padres que le compren un perrito, yo siempre estuve rodeada de lindos animalitos que nunca han dudado en entregarme todo su amor. A veces me pregunto quién salva a quién, si nosotros a ellos o ellos a nosotros.
¡Aquí les dejo fotos de algunos de estos particulares miembros de mi familia! En una próxima entrada prometo hablar y publicar fotos de cada uno de los 24.
Como era de esperarse luego de haber sido criada rodeada de tantos animales, desarrollé muchísimo respeto por la madre naturaleza. Desde pequeña, mis padres me inculcaron que cualquier forma de vida (por más diminuta que sea) merece respeto y me enseñaron que yo no soy nadie para acabar con una vida, ni siquiera con la de un insecto. Debe ser por esto que desarrollé una sensibilidad muy grande ante las injusticias: no tolero las guerras, los asesinatos ni las críticas destructivas.
Soy partidaria de que el mundo sería un lugar más ameno si nos aceptáramos más los unos a los otros, si dejáramos que cada quien sea feliz a su modo. Para mi todas las personas tienen los mismos derechos, independiente de su religión, raza, nivel social, educación o preferencia sexual. Todos merecemos poder ser quien queramos ser libremente y hacer lo que queramos con nuestro cuerpo y mente: creer en lo que queramos, amar a quien queramos, vestir como queramos.
Sé que, para que eso suceda, falta mucho; la humanidad tiene aún muchísimo que aprender. Posiblemente en esta vida no pueda conocer un mundo sin guerra ni odio, pero tengo la esperanza de que tal vez en la próxima pueda hacerlo. Algunas veces siento una presión muy grande para cambiar al mundo: me indignan las violaciones, los asesinatos, la destrucción de la madre naturaleza, la homofobia, el racismo, la negatividad… entiendo que yo sola no puedo cambiar a un planeta entero, pero desde mi pequeño universo pongo mi granito de arena para hacer de este mundo un lugar más llevadero.
Soy de esas que piensan que todos estamos aquí por alguna razón, que nada es casualidad y que la vida se basa en una serie de lecciones que nos sirven para evolucionar y convertirnos en mejores personas. Quizá sea por mi tendencia soñadora, no lo sé, pero me gusta pensar que el bien triunfa siempre sobre el mal, aunque este mundo, la mayor parte de las veces, diga lo contrario.
En mis veinte años no he vivido demasiado, pero sí lo suficiente como para saber que quiero hacer y lograr en mi vida:
1. Escribir un libro.
2. Seguir haciendo teatro.
3. Seguir cantando.
4. Crear una fundación para ayudar a animalitos en situación de calle.
5. Ser feliz.
Son mis cinco metas principales. Sé que suenan simples y no muy fuera de lo común, pero es lo que realmente quiero hacer con mi vida (por ahora). Quiero aprender de cada experiencia: aprender de lo malo, disfrutar de lo bueno; aprender de mis errores y corregirlos. Dejar de ser tan terca, no exigirme tanto. Entender de una vez por todas por qué estoy aquí, entender por qué nací terminando el siglo XX y no a sus comienzos... vaya que me hubiese encantado nacer en 1942, como mi abuelo y así haber visto el inicio del Rock n’ roll y también haber podido vivir la época en que la música gritaba libertad y no solo millones de dólares.
Una de las cosas que más me atormenta es haber nacido pisando los 2000. No tienen ni la menor idea de cuanto deseo poseer una máquina del tiempo y por tan solo un segundo colarme en el festival de Woodstock de 1969 para disfrutar de tres días de paz y música; para poder disfrutar de Janis Joplin, Joan Baéz, Richie Havens, Joe Cocker y todo el resto de fantásticos ídolos de la música. Desde mi punto de vista, ninguna época se compara a esa. Invierto gran parte de mí tiempo leyendo respecto a ella, informándome de sucesos que ocurrieron durante ella; en su mayoría referente a músicos de ese tiempo. Me obsesiona saber de esa música, de la historia detrás de las canciones, de las gruppies, de las bandas, soy curiosa por naturaleza, qué más puedo decirles.
A decir verdad tengo más curiosidad por el pasado que por el futuro. Me apasiona mucho más saber que pasó al que pasará. Si tuviese la oportunidad de viajar en el tiempo sería sin duda al pasado, pienso que es donde se esconde la respuesta a todo y de alguna manera siento que conociendo el pasado, puedo conocer también el futuro. Creo que en algún lugar del pasado se esconde la respuesta al “¿quién soy?” que todos nos hemos hecho alguna vez.
Sinceramente yo aún no sé con certeza quién soy, mucho menos quién seré pero lo que sí sé bien es que cada día estoy más cerca de encontrarme, mientras tanto soy feliz actuando, cantando, haciendo poesía, amando y leyendo, mientras tanto soy feliz conmigo misma. ¡Bienvenidos a este pedacito de mi vida!
Welcome to Steemit!
Thanks !!!!!
Maravillosa introducción Dhanna. Bienvenida a Steemit y mucho éxito. Que hermoso debe ser vivir rodeada por la naturaleza y además con tantos peludos que solo nos dan alegría y amor. Un saludo querida Dhanna.
Cada día me siento afortunada por eso, es una manera muy bella de crecer y vivir. ¡Gracias por tomarte tu tiempo para leer mi introducción!
¡Bienvenida @dhannabao! te deseo muchos exitos. Te estoy siguiendo.
¡Gracias por el apoyo! También te sigo. ¡Éxito!
Welcome to steemit from @lopezdacruz. All the best in your steemit journey.
thanks!!!!!
you block me why?
Bienvenida, espero ver más de ti por este medio :)
¡Gracias! por supuesto que verás más de mi contenido. ¡Saludos!
Bien venida a la plataforma! Espero que te lo pases bien en ella. Te acabamos de votar esta maravillosa introducción. Bueno, y si necesitas ayuda o cualquier caso puedes venir al chat:
https://discord.gg/D62eYyj
Un saludo @pgarcgo manejando @cervantes.
¡Muchísimas gracias! Estoy muy contenta de que les haya gustado mi introducción y muy agradecida por su voto. Estoy muy entusiasmada de mostrar mi contenido en esta maravillosa plataforma. ¡Un saludo gigante y mil veces gracias!
Te sigo, muy bella introducción.
¡Gracias, amigo! Me alegra que te haya gustado.
great post