El libro de mi vida..

Hoy les quiero contar sobre el libro de mi vida, suspiro cuando lo leo, cuando pasó sus páginas siento que me lleno de vida, y sus palabras son como una espada de dos filos que traspasan mi tuetanos y separa mi alma de mi esporitu.
Me lleno de vida al contemplar sus versos, como si fueran dulces melodías que le dan Son a mi ser.
Conocí este libro cuando tenía 16 años recuerdo que la primera vez que tuve sus lomos en mis manos, lo abrí y lei sus primeras lineas,
Mi corazón empezó a palpitar muy fuerte; y me pregunte- ¿será que puedo hacer todo lo que me dice que puedo hacer? y ¿sere todo lo que me dice que puedo ser?
Que lindo, leerte libro de mi vida, es como si tus páginas estuvieran escritas con un pulmón de amor dedicado a mi, como si El novio me hubiera dedicado cada una de tus líneas
Tus bellas palabras soplan suaves y tiernas sobre mi ser y llenan mi alma mostrándome todo el bien.
encontré en ti la verdadera razón de la vida. el principio y el fin de todas las cosas, la Verdadera belleza.
Cuando más te leo, más segura me siento, y si hay tristeza ella no perdura en mi ser, dejando entrar a la alegría en mi corazón.
Cuando te leo, escucho al El novio, susurrar a mi oído "te amo".

Cuando por alguna razón no te leo siento que mi alma se seca, secándose de Sed de ti amado libro de mi vida.

Como no sentirme así, si fuisteis escrito a puño y letra de mi Creador cada línea fue inspirada por El,
Estas son palabras inéditas que salen de mi alma inspiradas por El Espíritu Santo que me lleva adorar al Padre.

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Cuando leemos la Biblia humildemente y con fe, Dios se revela a nuestra mente. Todo lo que Dios nos da a conocer es la verdad. No busquemos la enseñanza de una religión. La verdad no es una religión ni un sistema de pensamientos; es una persona: Jesucristo, el Hijo de Dios. Conoceremos la verdad sobre Dios, sobre nosotros mismos, sobre el sentido de nuestra vida y sobre el más allá, si creemos en Jesucristo, quien dijo: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida” (Juan 14:6).

JOSUE:1:8-10 Medita día y noche el libro de esta ley teniéndolo siempre en tus labios; si obras en todo conforme a lo que se prescribe en él, prosperarás y tendrás éxito en todo cuanto emprendas. 9 Te he mandado que seas fuerte y valiente. No tengas, pues, miedo ni te acobardes, porque el Señor tu Dios estará contigo dondequiera que vayas.

Gracias

hoy decidí escribir algo diferente...