Qué les dirías tú | 3ra. Edición

  La objeción es un argumento que siempre va a estar presente en nuestros juicios, porque estar de acuerdo con todas las acciones de otras personas e incluso, las nuestras, no es posible. Por ello, emitir una opinión, puede llegar a ser el detonante de la confrontación.

  Partiendo de lo anterior, tenemos el escenario ideal para analizar y reflexionar en cuáles son las palabras idóneas que podemos emplear para opinar respecto a alguien y, la dinámica de nuestro amigo @cruzamilcar63 es una excelente práctica para esto. Sin más preámbulo, comienzo con mi participación.

  Expresar nuestras ideas, es el acto que nos permite emitir el punto de vista que poseemos respecto a una situación. Partiendo de esto, opinar es uno de nuestros derechos universales que debemos hacer valer y respetar en todo momento, porque de esta acción queda en evidencia con lo que estamos de acuerdo o, simplemente, rechazamos.

  Cabe destacar que, aunque expresarnos es un derecho universal, dicha acción no es sinónimo de tener los mismos ideales con otras personas, por lo que, independientemente de que las creencias no coincidan con otros, hay que hacer manifestar nuestras objeciones cuando es necesario y, escuchar las de otras personas.

  Frecuentemente, suelo coincidir con personas que tienen este tipo de ideales y, cuando la conversación se presta para el debate, les digo que ninguna época de la historia, ha sido fácil, porque independientemente de la línea de tiempo en la que se esté, la adversidad siempre encuentra la manera de entrar; siendo esto algo imposible de detener. Por lo tanto, en vez de quedarnos anclados en los conflictos, hay que investigar qué sucedió en el pasado, para así comprender ampliamente lo que está ocurriendo en el presente y, con esta información, tenemos las herramientas que permiten canalizar la forma idónea de afrontar lo que sucede en el período que vivimos.

  Además de lo anterior, también les digo que, los peores momentos, tienen la facultad de extraer las mejores oportunidades y, aunque la historia se vislumbra como el peor caos, la realidad de todas estas situaciones es que, tenemos ante nosotros excelentes oportunidades para finalizar con conflictos históricos.

  Gracias a los estigmas sociales, la teoría de que somos indispensables, se ha mantenido en el pensamiento de las personas que se acoplan este falso ideal y debido a ello, la supremacía hace de las suyas de manera descarada e impresionante. Por lo tanto, a estas personas les digo que absolutamente nada en el mundo terrenal es eterno y, el cambio o la sustitución, siempre va a llegar; acotando que, esta novedad sucederá por igual en aquellos que cumplieron sus acciones de forma correcta o, abusaron de la posición que tenían.

  El cambio siempre será necesario y, esto más allá de verlo como una derrota, hay que visualizarlo desde el contexto reflexivo, porque así como nosotros en su momento tuvimos la oportunidad de estar en un lugar donde aportamos nuestras ideas, otra persona preparada, también puede llegar a estar en ese punto para aportar sus conocimientos.

  Estoy convencida de que, la infidelidad, en ningún contexto puede ser justificada, porque es una mala acción en todos sus sentidos y, a pesar de ser una situación muy incómoda de revelar, no dudaría en manifestarle a esa persona de confianza sobre la traición que están ejerciendo en su contra, porque de no hacerlo, estaría siendo cómplice de algo aberrante. Ahora bien, para revelar esa información, me aseguraría de conocer los detalles elementales del engaño y, teniendo las evidencias en mi poder, con acciones empáticas le diría que su relación está quebrada y no por ella o él, sino por la decisión que tomaron de estar con alguien más al mismo tiempo, pero en ese caso, lo hacen de manera oculta.

  La IA es una herramienta que está siendo desarrollada con la intención de reemplazar la mano humana y, a pesar de que para nadie es un secreto que en algunos sectores nos hizo a un lado, una exclusión total es imposible de lograr. Por ello, a quienes aseguran que sí es posible que dicha tecnología nos sustituya en absolutamente todo, siempre les digo que permitir esta acción, sería un terrible acto de cobardía de nuestra parte y, en vez de quedarnos con los brazos cruzados viendo cómo tal vez se logra, hay que hacer lo elemental para resaltar que nuestra presencia posee un rol elemental para todo lo que implica vida real.

  Tengamos en cuenta que, para su desarrollo, la IA nos necesita y si analizamos este pequeño, pero gran detalle, rápidamente llegaremos a la conclusión de que, esa es la mayor prueba de que, la sustitución total, jamás será posible de lograr.

¡Muchas gracias por leer mi publicación!

^{Las imágenes presentadas en esta publicación fueron editadas en la aplicación de diseño Canva}