Cuando nuestra mente nos engaña...

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Veo un grupo de pájaros volando hacia el horizonte en un atardecer hermoso...

A veces siento una gran nostalgia y me conlleva a querer ver algo diferente... Oculto esos sentimientos con deseos de vuelo, de conocer otros rumbos, pero la verdad se, que todo es un engaño de mi mente, porque otro destino no me sacará esa nostalgia, entonces comprendí que más importante para mí es descubrir a ese quien maneja dichosos destinos y el que le da a cada quien un propósito, donde desearía con el alma que me muestre el mío...

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Veo a un extraterrestre que no le gusta el ruido del mundo, se aturde fácilmente y desea desaparecer, por lo mismo se aleja hacia donde está el mar...

Mis sentidos me sobrepasan, los gritos de mi mente no me dejan quieta, me siento como extraterrestre en mi propio mundo, un mundo desconocido, aunque pertenezco a el, no lo reconozco, es ajeno a mí, pero es una gran dicotomía porque a la vez puedo vivirlo, y no me desagrada... Sin embargo cuando estoy acompañada compartiendo con el mundo, es allí que mi mente grita, no lo puedo soportar, me dice huye, vuela, no perteneces aquí...

Pues, hay momentos que le hago caso y me encierro en un mundo imaginario donde lo de afuera no me puede afectar, ese mundo lo reconozco es como una burbuja donde adentro está un pedacito de mar, y está un banquillo donde allí me siento y soy feliz, ya mi mente no grita... No obstante, no me quedo en él, ya que está ese otro mundo y aunque mi mente se inquieta en ese lugar, eso a la vez me trae satisfacción porque en medio de ese bullicio es donde puedo encontrar destello de paz... Como sabría que es la paz, si no experimento lo contrario...

Gracias a @inspiracion y @wakeupkitty por ser participe de esta iniciativa...