CONCURSO: ASÍ ME TRATÓ ENERO
CONCURSO: ASÍ ME TRATÓ ENERO
Hola, apreciada comunidad. Espero se encuentren bien y que estén atravesando un mes próspero y luminoso. Antes de compartirles mi participación quisiera agradecer a la compañera @anasuleidy por esta iniciativa, puesto que esta sirve de mucho para darnos a conocer, además de ser una oportunidad para desarrollar nuestra sensibilidad y creatividad. Sin más preámbulos, les comparto lo que fue mi mes de enero.
Existe la creencia popular de que el mes de enero es el mes más largo del año, y que dentro de él caben todos los demás meses juntos. La verdad no sé si sea cierto, de hecho, nunca le he prestado suficiente atención al asunto. O mi naturaleza es atemperal o vivo al margen de los relojes (aunque, paradójicamente, soy en extremo puntual. Pienso que no existe algo más valioso que el tiempo. Un minuto perdido no puede recuperarse ni con todo el oro del mundo).
Lo cierto es que, al menos en lo que a mí me concierne, este mes se me hizo, más que inacabable, agitado e intenso. Fue mucho lo que experimenté en esas cuatro semanas (cosas que permean a febrero y que creo afectarán a todo mi año 2022). Podría decirse que enero fue un viaje turbulento para mí, lleno de alegrías y sinsabores. Sin embargo, agradezco lo que me sucede, he aprendido que de todo se puede extraer conocimiento y experiencia. Por esa razón dividieré los sucesos por semanas, de esa manera será más ordenada la lectura:
Tras las doce campanadas que anunciaron, al mismo tiempo, la muerte del año trascurrido y el nacimiento del venidero, sabía que era cuestión de tiempo para deprimirme. Y no es que sea adivino o que me imponga sufrir a voluntad, es solo que, quien conoce su cuerpo sabe cuando este no está en armonía. Y es que llevo ya dos años atravesando problemas en el colon (problemas que aun no conozco con exactitud. Aun no he podido hacerme los exámenes pertinentes para saber qué es lo que tengo).
Y no solo eso, desde el punto de vista laboral estoy atravesando una crisis muy fuerte y que me hace debatir internamente respecto a mí futuro. En resumen (no quiero explayarme hablando de cosas negativas), los primeros siete días de enero fueron difíciles y me costó mantener el ánimo y la energía. Algunos días los pasé en cama, sin ganas siquiera de levantarme. Por fortuna soy una persona muy activa y eso me ayudó a manejar la situación.
Creo que esa situación emocional me trajo consecuencias negativas. Supongo que el nivel de estrés debilitó mi sistema inmunológico y me hizo presa fácil de virus y otras enfermedes. Recuerdo que durante uno de los ensayos de la obra que presenté a finales de mes estaba bastante bien de ánimo, pero eso no impidió que me contagiara con Covid. ¡Vaya calamidad! De inmediato volví a debilitarme y a sentirme mal física y energéticamente.
Por desgracia todos los del equipo se contagiaron al igual que yo. Como era de esperarse entramos en pánico. No sabíamos que hacer: cancelar la temporada (pautada desde hace meses) o seguir ensayando (estábamos a dos semanas del estreno). Debatimos con fervor, evaluamos la posibilidad de cambiar fechas, nos enojamos. Pero, al final, decidimos, como equipo, continuar y estrenar la pieza (ya llevábamos dos años de trabajo).
Creo que esta fue la mejor decisión. Seguir postergando el estreno no hubiese sido muy positivo para mí. Hacer teatro me libera y distrae de los problemas del día a día. Gracias al arte me siento en paz, útil, verdadero.
Los síntomas del Covid solo me duraron un par de días (creo que mi sistema inmune no estaba tan débil como pensaba). Solo perduraba la fatiga y la sensación de ardor en la garganta. No obstante, el tema gástrico empeoró un poco. Por esa razón decidí ir al médico para que me hiciera un eco abdominal. Tuve mucho miedo. No sabía qué hacer. Mi único pensamiento era terminar de presentar la obra y para ello debía estar sano y en paz.
Ya en el médico (Periférico de Catia) el doctor me atiende, y después de hacerme el eco me dijo que estaba bien, que solo tenía dos cálculos renales pequeños. Me insinuó que mis síntomas gástricos también pueden deberse a eso, pero que no descarta la posibilidad de que padezca Síndrome de Colon Irritable (pero no puede decir nada concluyente hasta que no me haga los pertinentes exámenes).
El resto de la semana se consumió entre ensayos y afinaciones para el tan esperado estreno de Yo Soy John Lennon. Durante los ensayos me sentía algo cansado, pero si hay algo que me caracteriza, es hacer las cosas con el corazón, así que el malestar no fue impedimento para que hiciera bien mi trabajo.
El 28, 29 y 30 de enero fueron los días pautados para el estreno. No sé por que, pero me sentía algo nostálgico: habían transcurrido dos años desde aquella vez que nos reunimos los demás participantes de la pieza para discutir todo lo relacionado al montaje. Todo me parecía lejano, difícil de creer. Pero ahí estaba, a punto de salir a escena.
Cada una de las funciones fue mejor que las otras. A medida repetía las pautas, me sentía más libre, más vivo, y esto lo puede sentir en los aplausos del pueblo, en la conexión que tenía con mis demás compañeros, en lo cómodo y tranquilo que me sentía mientras decía mis parlamentos y seguía la plata de movimientos. Al final, los aplausos me ratificaron que, pese a lo difícil de hacer arte en este país, siempre vale la pena entregarse al oficio.
Me atrevo a decir, pese a lo mal que me sentí durante todo el mes, que tuve un enero maravilloso. Y esto lo digo con sinceridad, pues, comprendo que sin importar lo mal nos podamos sentir, podemos encontrar belleza. No olvidaré lo felices que estabas mis familiares tras la función, y menos el abrazo que nos dimos mis compañeros y yo en el comercio del Teatro Alberto de Paz y Mateos. No cabe duda que el arte nos une, nos nutre, nos salva, de que el amor nos hace libres.
Sin más qué agregar me despido. Espero mi post sea se agrado para ti. Nos vemos en próximas publicaciones.
Me encanta tu participación, primero que nada felicidades por haber superado el covid y por el estreno de tu obra, Enero como otros meses está lleno de altas y bajas, alegrías y tristezas, disfrutes y aprendizajes, lo genial es ver lo positivo de la vida y continuar!!
Gracias por participar, tienes la entrada #15 🍀