Tampoco me he olvidado de jugar... conmigo mismo.

No te olvides de jugar...

¡Qué linda frase!, ¿no?

Si tan solo la usáramos cada vez que abrimos los ojos en cada mañana que se nos permite un día más en esta tierra llena de gracia y de infinitas oportunidades.

Cuando niños, jugábamos todo el tiempo, y eran nuestros adultos quienes nos detenían en la mayoría de los casos. ¿Por qué tenía que ser así? Jugar, era nuestro diario vivir, y no perdíamos la oportunidad de hacerlo en cualquier lugar.

Recuerdo bien, como si fuera ayer, que apenas veía una hormiga, la contemplaba; Seguía todos sus pasos hasta que entraba en el hormiguero, o en cualquier rendija. ¿Y los insectos? No había ninguno que se escapara de mi observación. Ese, mis queridos lectores invisibles, ese era mi mayor juego.

Claro que jugaba con otros amiguitos, a la pelota, al fútbol, y a un sin fin de juegos más que, hoy en día, no son tan frecuentes gracias a la tecnología. ¿Será que ya no estamos pendientes de esos juegos por estar sumergidos en las tantas ocupaciones que nos autoimponemos?

Quizás, sí haya dejado de jugar en muchas ocasiones, cuando mi trabajo y la responsabilidad que me ata a él, se interpone, no obstante, procuro divertirme siempre en cada cosa que hago, reír, cantar a todo pulmón sin importarme si lo hago bien o no.

¡Esto forma parte de mis juegos ahora!

_{Imagen obtenida de Pixabay}

Y si haciendo esto logro divertirme... ¿Por qué no aprovechar cada oportunidad para hacer aquello que tanto me gusta, me distrae del afán de cada día, y me libera de tantas responsabilidades?

No me olvido de jugar, mis amados lectores invisibles, solo voy posponiendo esos momentos por otras cosas que también son importantes, y aun así, si puedo jugar mientras desarrollo otras actividades, no tengan duda de que me divertiré tanto como pueda.

Cuando escucho esta frase, y estoy atestado de compromisos por hacer, lo que hago es que me levanto más temprano de lo habitual, y dedico algunas horas a imaginar cómo sería mi vida si...

¿Lo han jugado? ¡Es muy sencillo!

Les contaré un secreto: Cuando aprendí que, todas las cosas que vemos fueron originadas en una mente y se hicieron realidad cuando ese pensamiento se convirtió en una palabra, se volvió en mi juego favorito, tanto en las mañanas, como en la noche antes de acostarme.

¡Es muy divertido!

Imagino cosas como por ejemplo: ¿Cómo sería mi vida si el dinero no fuese un problema?, y es donde comienzo a vivir mi vida de millonario en mi mente.

Gracias a este juego, he logrado conocer 5 países, obtenido buenos empleos, mejores amigos, muchísimas experiencias, el dinero ha fluido abundantemente, aunque también debo reconocer que, también ha faltado en ocasiones, no obstante, no ha sido por mucho tiempo, ni tampoco me he preocupado por esto, porque estoy plenamente convencido de que, Dios (o como quieran llamarle) también se encargará de proveer conforme a sus riquezas y su gloria.

Cuando escucho esta frase, esto es lo que hago.

Me gustaría invitar de @zhanavic69, @helengutier2 y a @ciru2014, a participar en esta dinámica.