Bastante interesante el nuevo desafío fotográfico de nuestra querida comunidad Steem Venezuela. El tema se sale de lo común y no nos lleva a lo repetitivo: que si las flores, que si los parques, que si los árboles… Este es un tema verdaderamente original: La iluminación, las fuentes de la luz, la luz que sale de un foco y se refleja en los objetos.

Pero antes de entrar de lleno a describir mi humilde contribución, me gustaría hacer referencia a lo que es la luz real y la luz simbólica dentro de nuestras vidas. Veamos:

Como lo apuntaba al principio, la luz es una corriente de energía que se despega de cualquier fuente, por ejemplo: el sol, la luna, las estrellas, una fogata, una vela, un bombillo, una luciérnaga, etc. Esa forma de energía que fluye a través del espacio a una velocidad vertiginosa choca con los objetos y se refleja. Allí es cuando decimos, por ejemplo, veo tu cara, veo los billetes, veo la arepa…

Pero por otra parte se tiene a la luz simbólica: la luz de la mente, del conocimiento, de lo que nos hace abrir la conciencia. Por eso no fue extraño que Cristo afirmara en uno de los evangelios: “Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no andará en las tinieblas…” Y es cierto, las enseñanzas de Cristo llevan a muchas personas a enderezar sus vidas.
A veces la gente se burla de los evangélicos o de los testigos de Jehová, pero en realidad no sabemos hasta qué punto la vida de los que se han convertido a esas religiones es mucho mejor que la que antes tenían.

El Libertador Simón Bolívar también dijo: “Moral y luces son nuestras primeras necesidades”, y en eso iba muy implícita la importancia que tiene la educación para los seres humanos.

Mis fotografías:

He decidido hacer una composición sencilla. La escena se tomó desde tres ángulos distintos. La vela es la fuente física de la luz. Pero por allí está también un libro (la Biblia), una fuente ancestral de conocimiento, de moral y luces.

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Fotos tomadas con un Huawei Honor