Muchas veces es necesario podar las plantas para evitar que afecten los cables, bien sea de electricidad, teléfono o televisión. Por lo general, las plantas quedan mutiladas y de pobre apariencia. En casos lamentables y extremos es necesario eliminar árboles por completo, debido a otro problema: el crecimiento del tallo y las raíces puede implicar la destrucción de paredes y la fractura del cemento o asfalto.

Pero, ¿son malos los árboles en el medio citadino? Desde luego que no. Ningún árbol es dañino, el problema es la mala ubicación y sus consecuencias. Como se decía al principio, las plantas le otorgan belleza al paisaje urbano y hacen que este sea un ambiente amigable, menos artificial. Otro de los beneficios de las plantas dentro de la ciudad es que amortiguan las temperaturas; es decir, entre más sombra exista, mejor será el clima y mayor será la calidad de vida de sus moradores.

Uno de los aspectos más atractivos de las plantas en las ciudades es su capacidad de atraer especies de animales silvestres; en particular, las aves. Notamos que existen decenas de especies de pájaros adaptados a los ambientes urbanos. En Venezuela es muy común observar azulejos, torditos, tangaras, reinitas, mirlos, paraulatas, cristofués, cucaracheros, entre otros. En verdad, no es buena idea despertar alguna vez sin escuchar el canto de las aves silvestres.

Desde otro punto vista, las plantas son las que mantienen viva a la humanidad, no solo porque nos dan de comer, sino porque son las grandes productoras de oxígeno. Se estima que un solo árbol es capaz de mantener a cuatro personas a lo largo de un año. Nada más y nada menos.

El crecimiento de este individuo afectó la acera y aún amenaza la pared.

Por dificultades para el transporte, algunos troncos quedaron como asientos.

Las fotografías son de mi propiedad y fueron tomadas con un Huawei Honor. La información sobre producción de oxígeno fue obtenida mediante el generador de preguntas de Google.

Invitación a: @inspiracion, @tocho, @soywilfredg