El transporte de carga pesada es vital para las economías de los pueblos. De esta manera se traslada una gran cantidad de bienes materiales que son necesarios para el buen desenvolvimiento de las sociedades. Alimentos, productos de cualquier tipo, sean para la construcción, partes de maquinarias, equipos, medicinas, llegan a los lugares más recónditos de los países, gracias al empleo de gandolas y camiones con capacidad para llevar grandes y pesadas cantidades de los más variados productos para su distribución y posterior comercio en el territorio nacional.

Imagen @lanzjoseg

Venezuela cuenta con importantes vías de comunicación y redes de carreteras a lo largo y ancho de todo el territorio nacional por las que circulan vehículos que van desde autos particulares, líneas de buses y camionetas de uso público y privado, así como camiones y gandolas de cargas ligeras y pesadas.

Cuando transitamos por las distintas carreteras y autopistas del país, sea que nos desplacemos por razones de trabajo, diligencias personales o por viajes de placer podemos observar la gran cantidad de vehículos automotor que hacen uso de ellas. Las carreteras y autopistas con mayor densidad vehicular están en el Distrito Capital, así como en los estados MIranda, Aragua, Yaracuy, Lara, Carabobo, Anzoátegui, Monagas, Zulia, entre otros.

De todos ellos, surge una red de carreteras que se interconectan con aquellas entidades más rurales y alejadas, con las que se mantiene una estrecha relación para propiciar el intercambio de mercancía y productos en todo el ámbito nacional.

Este intecambio, producto del transporte y tránsito que hacen posible los grandes camiones y gandolas de carga, es uno de los factores importantes que mantienen viva y dinámica la economía en todo el territorio nacional.