Unas Palabras Para// Siempre te amé.

Escribir sobre mi papá es una tarea pendiente, creo a estas alturas que fue un gran ausente de varias maneras, pero a la vez considero que hizo lo que pudo con lo que tenía. Mis padres se separaron cuando yo apenas cruzaba los 7 años, recuerdo como me aferré a su pierna llorando para que no se marchara cuando mi mamá (con mucha razón) decidió terminar su unión matrimonial.

_{Imagen propia. Mi papá y mi hijo}

En un inicio mi madre viviendo su proceso le impedía vernos, él llegaba hasta la ventana de la casa y disimuladamente me dejaba una nota de papel; “aquí estoy te traje algo, disimula y sal a la puerta” y allí estaba con una bolsita, un regalo cualquier cosa para su niña. El tiempo transcurrió y todo fue más complejo, nunca nos abandonó económicamente hablando, nos sacaba a pasear los fines de semana como en la mayoría de los divorcios, pero él estaba ausente, ausente de esencia de paternidad, crecimos y seguía “atendiéndonos” a mi hermano y a mí pero la única conversación profunda que tuve con él fue cuando cumplí 30 años.

Volvió a casarse y tuvo otros hijos, allí fue radical el cambio, imagino que no quería cometer los mismos errores con los nuevos, 2 varones y una niña. En una oportunidad sin ser vista por él lo vi a lo lejos con su nueva familia, ya que mi mamá no entendía ni era tan amplia para que tratásemos de manera frecuente con nuestros hermanos, por otra parte mi padre tampoco lo propiciaba. Lo vi cargando y jugando con mi hermanita 30 años menor que yo, una sensación de abandono por primera vez recorrió mi cuerpo…mi papa tenía otra hija.

Sin embargo llegó el sabio maestro “tiempo” y las edades tan lejanas tan distantes entre sus nuevos retoños y él, hizo que se acercase más a nosotros los primeros, los que podíamos escuchar con él música sin fastidiarnos, contar chistes y entenderlos, llegó la paz del alma para todos, en una larga conversación nos pidió perdón “por el supuesto abandono”, por su distancia emocional, por su poco criterio para actuar como un padre conductor, guía. Amé siempre a mi papá, le entendí que no podía darme más porque no sabía cómo. Partió hace casi tres años, lejos estando con su familia en Chile, el día que marchó del país sabía que ya no volveríamos a vernos (era lógico pensar así) lo llevo en mi corazón…tuve un padre especial dentro de todo, que me enseñó mucho a su manera, con sus limitaciones pero sé que me amó.