Iniciando el día con otra triste noticia por el grupo de la familia Liliana, escribió bien temprano que había fallecido la suegra de mi prima Aura. Doña Hilda de Silva, una anciana de 90 años, quien conocí de toda mi vida, pues era la vecina de mi abuela materna y muy querida por todos nosotros, quién también fue parte de nuestra familia.

Este mes de julio nos ha golpeado fuerte nuestro corazón, ya es el tercer familiar que fallece, primero el tío Eloy, luego mi primo Manuel y ahora doña Hilda. Pero antes las decisiones de Dios nos toca aceptar.

Conversé con Liliana y le dije que iríamos al velorio por la tarde porque mis hijas están trabajando y tengo que cuidar los niños.

Hice todo mis oficios temprano cocinar y ordenar mi cocina porque eso lo voy haciendo al mismo tiempo, no me gusta tener nada desordenado cuando estoy cocinando.

Salimos como a las 3 para ir a buscar a Tania y luego vamos para surtir gasolina que me corresponde el día de hoy, no puedo pasar la oportunidad porque la semana pasada no fui debido a que todavía tenía.

También pasamos por un sitio donde Yole iba a preguntar el precio de la moto que se quiere comprar. Fue algo rápido y continuamos nuestro destino.

Llegamos a Biruaca a casa de mi prima y al frente era el velorio, en la calle estaba ubicado el tordo.

Saludamos a los presentes y dentro de ellos estaba una ex compañera de estudio de Johana. Quién se alegró mucho al vernos porque tenía años que no nos veíamos.

Luego fuimos con nuestra prima a dar el pésame a los familiares de doña Hilda, todo conocidos en especial de mi persona, porque yo era muy pegada con mi abuela y siempre me la pasaba en su casa.

Por consiguiente tenía muchas personas por saludar a los cuales le tengo mucho cariño, dentro de eso una vecina que por cariño le decimos la negra.

Ahí me conseguí a mi amigo Roberto, quien tenía tiempo que no lo veía, y también a su hermana María Silva a su papá y a otros hermanos. Ellos también son familia de la difunta y son mis amigos.

Se nos hizo de noche porque estábamos también esperando un primo que venía del municipio Achaguas, hermano de Aura. Y queríamos aunque sea saludarlos y saber cómo estaban sus hermanos por allá.

Llevé a mis hermanas a su casa y cuando llegamos, como ya habíamos cenado, porque en el velorio nos dieron arepa con queso y café. Me di un buen baño y me tomé una pastilla porque estaba con un poco de dolor en la rodilla y no supe cuándo me quedé dormida.

¡¡¡Gracias por llegar hasta aquí!!!

Todas las fotografías fueron tomadas con mi teléfono Redmi 10 C