Nuevamente por aquí escribiendo historias para reflexionar, llamando la atención de este público distinguido que comparte día a día en la plataforma de Steemit en sus distintas comunidades. Aprovecho la oportunidad y los espacio para concientizar situaciones difíciles que el mundo vive actualmente. Quiero congratular a nuestra auspiciante por delinear el concurso con suspicacia indicando palabras clave para desarrollar de manera inédita una narración escrita incentivando la creatividad, además nuestra respetada @alexarelatos con su extraordinario estilo induce a las pinceladas de mil colores que a pesar de todo la siempre triunfa, alimentando los para quienes intentamos proyectar historias, convirtamos en un el rincón donde guardamos nuestro computador y cómo fulgurado de lluvias de ideas que levantan la a los que por steemit se pasean, gracias comunidad latina por engendrar los de los hombres y mujeres que en ti se refugian cómo de la esperanza de una vida mejor, espero que les guste y reflexionemos al respecto sentado junto al computador con jugo de y algo de para disfrutar mejor.

Su nombre es, Sadie Abu Hasi, un joven sometido por una guerra que empezó mucho antes que él naciera, estaba allí incólume frente aquel destellos de luces como si erosionara un volcán, con olor azufre, calor, desolación, destrucción, muerte.

Por su mente solo se paseaba aquel de esperanza, de que su tierra algún día amanecerá libre e independiente. Cuentan aquellos que lo vieron que por sus ojos brotaban desconsoladas lágrimas, estaba allí inmóvil sumergido en un mitigado por la tragedia y dando impulso para socorrer a los caídos, se contaban entre ellos niños, ancianos y mujeres, todos civiles, del miedo y la desolación, sin poder despreciar la cortesía de la muerte que estremece lo que queda, si es que lo hay, un gramo de .

Sadie Abu Hasi se adentra al cuadrante de la hecatombe a socorrer a los heridos, encontrándose con el milagro de Jasin una niña de apenas 6 años, estaba allí desangrándose, sin pensar la tomó entre sus brazos y salió deprisa del infierno, centro del bombardeo, llegando al punto de control de la cruz Roja, cuando el paramédico la tomo para suministrar los primeros auxilio y tratar de reanimarla, justo en ese instante se detuvo su corazón por segundo, el representante de la Cruz Rojas sigue insistiendo con respiradero artificiales y colocando ácido tranexámico para lograr estabilizar.

Jasin sacando fuerza desde el alma toma un segundo impulso y sus pulmones exhalan aliento de vida, en ese momento en medio de la y la tragedia hubo un regalo de Dios el milagro.

Sadie Abu Hasi, colocó suavemente un en la frente de la pequeña Jasin, susurrando al oído todo va estar bien, la niña inocente de todo lo que pasa y soñolienta por el impacto le retribuye el gesto con una ligera sonrisa como dando las gracias por su valentía.

El valiente socorrista regresa al epicentro del ataque, mirando a los fieles cristianos y judío orando juntos pidiendo misericordia en ese instante viene a su reflexiva conciencia la Fe de aquel Domo de la Roca un lugar tan valorado por todos los hijos de Dios que habitan en esta Franja de Gaza atormentada por la empecinada e innecesaria guerra por cuestiones étnicas religiosas y geográfica.

En ese instante Sadie Abu Hasi, mira unos escombro y advierte una mano que sobresale debajo de las piedras pidiendo socorro, con sus manos empezó a socavar y quitar las piedras que reposaban encima de la humanidad de aquella mujer, cuando empieza a sonar las alarmas y sirenas que indicaba que tenían que resguardarse y huir del lugar porque venía un segundo bombardeo, el seguía sumergido en su intención de salvar esa vida, cuando de pronto empezaron a sonar los primeros morteros, cuando por fin logró desalojar lo suficiente para ayudar a la joven mujer. Una hermosa doncella con un atuendo juvenil de color rosado , un segundo milagro estaba justo al frente de Sadie, la cual la toma por la mano y apuran el paso para salir de allí, también la llevó al centro de refugiado donde se encontraba la unidad de la Cruz Rojas.

Nuestro amigo estaba disminuido, fue de mucha tristeza el destrozo de aquel día, una guerra que ellos no merecen, una niña, una joven, y un joven tres vida que se reencontraron en un milagro de fe víctima de la irracionalidad, eran los de aquel instante, pero se hallaba en él un sentimiento de porque dos esperanza se suman a las de el que se rehúsan a morir y con una vida mejor, donde ellos puedan ser de la concordia y con un dar gracias por todo y en medio de la del renacer de un nuevo día, poder sentarse y ver otra película en el diván degustando unas ricas con mantequilla con sabor a paz.

Con esto me despido hasta una nueva oportunidad esperando que esta narrativa reflexiva cale y nos ayuden a proponer la paz y la concordia en todos los espacios posible para construir una mejor humanidad, gracia a la comunidad Latina por la oportunidad que nos brinda y gracia a la auspiciante @alexarelatos por la propuesta y gracias a todos los que me leen. Por último quiero invitar a tres de mis fieles comentaristas, @mini80 @rankari6 @raysoniel, aquí les dejo el enlace para que se enganchen y realicen sus excelentísimos trabajos: