V Edición, Concurso: Sobredicho

♥️ ¿Es verdad que barriga llena hace a un corazón contento?

La panza vacía es una necesidad que hace la mente chiquita y solo se piensa en llenarla. Cuando se llena, uno queda gordo de felicidad. Es una felicidad económica según el país y el precio de la comida, pero deja una sensación de satisfacción impagable aunque no dure mucho, como todas las cosas buenas que son escasas. Ni hablar si se come un helado, una torta, un postre o carne asada de calidad. Ahí la felicidad es sublime, o ¿quién lo puede negar? Nadie. Todos somos gordos de alma, aunque el ADN inexplicablemente te mantenga flaco.

♥️ ¿Cuando los ojos no ven, el corazón no siente? ¿O lo sospechas?

Me pasó una vez. Me lastimé el dedo, era chico y no me dolía. Lo miré y empecé a llorar, así que los ojos son como una trampa que engrandece las cosas al máximo. Por eso son tan buenas las publicidades, pagan fortuna por dar resultados.

♥️ Con millones de dólares compras mil cosas, pero solo con un beso compran tu corazón. ¿O eres/fuiste más exigente?

Plata, plata, plata. El amor es secundario, la plata es lo primero porque sin plata no hay amor. Como dice la canción, no se puede vivir del amor, no se puede comer el amor. La plata es la raíz de todo mal y de todo bien. No hay término medio, es la ganadora. Muchas veces no se sabe si las relaciones sin plata seguirán tal como con dinero, por las dudas no prueben, porque pueden quedarse solos.

♥️ Dicen que el amor no es quien enciende la llama en el corazón sino la pareja que mutuamente la mantiene viva. ¿Qué tanto la mantienes tú?

Las preguntas que pide el amor las responde el amor de la otra persona, porque si no es correspondido, no es amor, es algo platónico. Debe ser correspondido y ahí aparecen los sentimientos, esos que son más fuertes que cualquier tempestad y arremeten con la suegra, la edad y los problemas de salud.

♥️ El agradecimiento es la memoria del corazón. ¿Qué tanto agradeces en tu vida?

El agradecer en respuesta a cosas que nos dieron o hicieron por nosotros es directamente proporcional al trato o actos, sean minúsculos o grandilocuentes. A mí me gusta agradecer por cosas simples como la comida que me sirven o los gestos de buen trato. Así se mantienen buenas las relaciones y no es en vano la vida juntos.