Hola Steemians

Bienvenidos

Hoy quiero contarles mi experiencia en el intento de renovar mi cedula de identidad, si no eres venezolano, la cedula es el documento de identidad nacional, con el cual un ciudadano sea extranjero o no, puede asegurar que pertenece a la población nacional.

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Ahora bien, este servicio de identificación poblacional está en manos del SAIME (Servicio Administrativo de Identificación y Extranjería) oficina que como todos los servicios públicos nacionales se han deteriorado con el tiempo, en estos últimos 20 años.

No me gusta ser víctima ni nada por el estilo, pero hoy confirmé que todo o bueno, casi todo servicio público está destinado a hacer perder tiempo a los ciudadanos. Les contaré mi experiencia en el día de hoy, pero antes de comentarles que como fue mi día, debo decirles que no tengo fotografías tomadas por mí, ya les explico el por qué no tomé fotos.

Como sabía que debía llegar temprano a la oficina del SAIME, me levanté a las 5 de la mañana comí rápidamente me vestí y salí a la oficina, como debía ir caminando y salía tan temprano decidí dejar mi smartphone en casa, porque como sabemos bien los venezolanos andar en ciertas horas por la calle es estar expuestos al crimen y ser víctimas de algún delincuente, y por esa razón no pude documentar el proceso.

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Llegue a la oficina a eso de las 6 de la mañana, y al ubicarme al final de la fila de personas que se formaban por la misma razón que yo, aproximadamente habían 80 personas antes que yo, enseguida se me acercó una persona y me ofreció el puesto número dos de la fila si accedía pagarle algunos dólares, ¿Cuántos? no sé, al darme cuenta de su intención le dije un tajante no, no iba a acceder tan increíble injusticia y ventajismo absurdo. Al rato, a mis oídos llegó la noticia que un señor si le compro el puesto por unos 10 dólares.

El único requisito que exigen para renovar el documento de identidad, es llevar una fotocopia a blanco y negro del documento vencido, en mi caso, tenía un año de haber vencido. A eso de las 8 de la mañana uno de los trabajadores del SAIME, movió la fila y mientras organizaba a las personas en el orden en el cual se había llegado, fue quitando las fotocopias en el orden de la fila, y aseguró que todos seriamos atendidos.

Unos 40 minutos más tarde, luego de atender a las personas de tercera edad que se habían formado en una fila diferente, la misma persona que se había llevado las fotocopias, volvió y se llevó a las primeras 20 personas de la fila. Erróneamente sumimos que saldríamos tempranos. Tuvo que pasar 2 horas para que el señor volviera y se llevara a las siguientes 30 personas de la fila. Eran casi las 11 de la mañana y aún tenía unas 30 personas por delante, paso un rato más, eran casi las 12 cuando el empleado del SAIME vino a buscar unas 15 personas más, pero esta vez hubo algo extraño.

Comenzó a llamar personas que estaban por detrás de mí, y su justificación fue que tomo fotocopias de "varias máquinas" y rompió el orden establecido por orden de llegada, pero afirmó que todos seriamos atendidos. Y si, efectivamente todos fuimos atendidos. A las 12:50pm, vino a buscar 15 personas, grupo en el cual yo estaba de número 15.

Ahora bien, lo impresionante es que este grupo de 15 personas en el cual yo estaba, duró dentro de la oficina no más de 20 minutos. Había dos chicas atendiendo a las personas, y no tardaban más de 2 minutos por persona, y rápidamente saqué mentalmente una cuenta matemática, si habían 100 personas formadas en la fila, y con cada persona no duraban más de 2 minutos, toda esa larga fila de personas sumaba 120 minutos, es decir, dos horas, supongamos que se extendiera un poco más, y fuesen 3 horas... Si comenzaron a atender a las 8:40 am, a eso de las 11:40 ya toda esa fila hubiese sido atendida, pero eran casi la 1 de la tarde y aún faltaban como 30 personas.

Quizás te preguntes…

¿Como era el proceso que era tan rápido?

Te cuento como era el proceso:

Al llegar al escritorio de la trabajadora del SAIME, le dictabas tu número de cedula, te buscaba en el sistema cosa que le tomaba un par de segundos, te pedía que miraras la cámara, te tomaba la foto y luego te pedía poner las huellas dactilares en un lector digital (el proceso de poner tus huellas no se tardaba más de 30 segundos) y para finalizar firmabas digitalmente sobre una pequeña pantalla...

LISTO, SI LISTO. Eso era todo... Antes de levantarme de la silla la chica me dice, ven el lunes entre las 9 y 11 de la mañana a retirar tu cedula.

Medio día para un proceso y regrese a casa sin el documento, ya que debo esperar dos días... No sé si en otro país de Latinoamérica pase algo similar. Pero estoy muy muy agotado, hoy fue un día de esos que te dejan sin aliento.

Necesitaba sacar todo esto y expresarlo...

Gracias por Leer