Mi familia siempre ha sido muy unida y esa es una de las cosas que admiro de ellos desde pequeño. Cada 31 de diciembre nos reunimos todos para realizar una cena y despedir el año en unión. Recuerdo que el último año donde estuvimos toda la familia junta fue el 31 de diciembre del año 2012. Fuí muy feliz en esa época, sin saber que el destino nos repararía un cambio rotundo los próximos años. Lo que más nos afectó fue ver partir familiares a buscar un futuro en el extranjero y ver poco a poco como quedaba un espacio vacío en la mesa, pero lo más importante y a pesar de las situaciones hemos sabido conservar la tradición navideña y tratar de que nunca de pierda.

Nuestra tradición la celebramos con una cena familiar donde quien pudiera aportar lo hacía y quién no igual era bienvenido, de eso se trata ser familia apoyarse unos a otros. La siguiente imagen fue en el año 2012 una de mis mejores Navidades, si es que no la mejor. Tenía 10 años para ese entonces.

De los siguientes años hasta el 2018, creo no tener recuerdos o quizá sí pero debía buscar muy bien. La foto que sigue fue el 31 de diciembre del 2019, fue el año más triste porque emigraron miembros de la familia pero hicimos lo mejor que pudimos con los que estábamos y se organizó una cena bien bonita.

En 2020, con menos integrantes y a pesar de la pandemia, se logró organizar la cena, está vez aprendimos a sobrellevar las cosas y despedimos el año félices.

Para estas Navidades 2021 no sabemos lo que nos tenga preparado, pero estoy seguro que como todos los años nos reuniremos los que estamos y compartiremos a gusto, celebraremos y agradeceremos a Dios por la vida y sus infinitas bendiciones. Mientras tanto en mi hogar mi mamá y yo ya estamos decorando como hacemos todos los años (forma parte de la tradición también) para recibir la Navidad y que el espíritu navideño nos deje cosas bonitas que llenen el alma.