El silencio impero en el lugar. Así permaneció por unos minutos que se hicieron eternos. ¿Quién podría opinar luego de semejante revelación? Si existen los momentos incomodos, este quizás sea uno de los que se ubica en lo más alto del podio.

El futuro occiso vio la sorpresa dibujada en el rostro de su vecino que poco a poco iba sentándose en la cama de su celda. Espero que el sorprendido terminara de ubicarse en su lugar y con un gesto de tranquilidad en su rostro le hablo.

– ¿Sorprendido? – La respuesta que recibió fue un si silencioso hecho con un gesto lento de la cabeza del interrogado. El interrogador mostro una leve sonrisa. – Así es la vida –

– Tú te quejas por tu situación, pero no vez tu entorno. ¿Robaste comida para alimentar a tu familia – Volvió a recibir una afirmación silenciosa. – Entiendo tu desesperación. ¿Pero pensantes más allá de la comida que le llevarías? –

– ¿A qué te refieres? – pregunto el vecino Manteniendo la postura. El interrogador pregunto. – ¿Cuánto tiempo es tu condena? – El interrogado suspiró para luego encoger los hombres y con su cabeza gacha respondió – Un año, seis meses si me porto bien. –

– Haz pensado que por una comida ahora tu familia tendrá que luchar sola por todo el tiempo que estarás aquí? – De los ojos del vecino salió una única lagrima que recorrió toda su mejilla.

– Es duro, pero hay que asumir las consecuencias de nuestros errores. No vale la pena alterarse, estar molesto y gritar a los 4 vientos la mala jugada que nos regaló la vida. –

– Ahora te toca luchar, trabajar para que tu sentencia sea rebajada. Para ello necesitas ponerte una meta y trabajar por ello todos los días. Esto sin importar lo que los demás digan, comenten o critiquen. –

El hombre escucho en silencio con su cabeza baja haciendo gestos de positivismo lentos con la misma. Seco sus lágrimas de su rostro y levanto la mirada para encontrase con la de la apacible del futuro occiso.

– ¿Asumiste tu error? – Pregunto tímidamente mientras terminaba de secar sus lágrimas y se ponía de pie. – Acabo de disfrutar una suculenta comida, me parece que eso lo demuestra – Comento con tono jocoso

Quien se había puesto de pie endoso una leve sonrisa acompañada de un gesto de asombro. – Pronto morirás, ¿Cómo pude estar tan tranquilo? – pregunto incrédulo

– Aceptación y conciencia tranquila – Respondió rápidamente el condenado a muerte. El asombro del nuevo interrogador aumento con la respuesta recibida. Quedo pensativo por unos instantes analizando la situación.

Los ojos del hombre del pan, el queso y la leche comenzaron a brillar. Una duda cruzo por su mente y tratando de no ser brusco preguntó – Una duda ¿Qué hiciste tu para que merezcas morir? –

– Pensar diferente, actuar diferente, no seguir la corriente. – Respondió el hombre sin inmutarse. – Simplemente ser diferente, ese es mi delito capital – El asombro domino el rostro del interrogador.

– ¿Y ser diferente es meritorio de un castigo tan cruel – Pregunto el hombre sin dar crédito a lo que escuchaba. El interrogado sonrió levemente. Se paró de su silla y camino hasta la cama. Levanto el colchón y de allí saco una cajetilla de cigarrillos. Saco uno y lo encendió.

Acto seguido, camino de nuevo hacia donde estaba y volvió a sentarse en la silla. Exhalo el humo de la primera bocanada que había consumido. Luego giro su mirada hasta encontrase con la de su vecino.

– Veraz. Tu delito es considerado menor. Algunos lo romantizaran diciendo que todo fue impulsado por la necesidad del momento. Es por ello que tiene la pena que tienes. Muchos discutirán los problemas sociales y económicos que lo impulsaron y bla, bla, bla, –

– Están los delincuentes peligrosos que son capaces de violar, asesinar, entre otras cosas. Ellos serán castigados más severamente. Es algo lógico. También están los delincuentes llamados de cuello blanco que son capaces de violentar a las masas, esos serán exonerados por intereses de un grupo –

– Y estamos quienes somos considerados peligrosos por no seguir los parámetros impuestos por grupos de idealistas sociales o políticos, fanáticos de religiosos hipócritas o grupos de defensas de falsos conocimientos. –

– Somos considerados los más peligrosos de todos merecedores del castigo mas alto para que el rebaño no se descarrile. Esto claro, cuando el desprestigio, la mala propaganda mediática, la manipulación de las masas, entre otras cosas, no funciona. –

– Así que heme aquí disfrutando mi ultima cena y de esta caja de cigarrillo como último deseo – Al terminar de hablar, llevo de nuevo el cigarrillo hacia sus labio para aspirar una gran bocanada.

El vecino no salía de su asombro. Su mente no encontraba lógica a las palabras de aquel hombre. ¿Esta condenado a muerte por pensar y actuar diferente?, pensaba. No le encontraba sentido a eso.

– Pero eso es injusto. ¿Cómo pueden asesinarte solo por no pesar como los demás? Eso es algo muy injusto, fuera de toda lógica. – comentó el interrogador sin dejar de lado el asombro.

– Quizás sea todo lo que dices, pero la realidad es esta. Simplemente moriré por pensar y ser como soy. nada especial, nada fuera de lo normal o lógico, pero diferente a las tendencias impuestas. La solución final, eliminarme. –

CONTINUARA…

¡Saludos!... Un cordial saludos a todos los miembros de la comunidad #WorldOfXpilar y al resto de la gran familia #Steemit.

Acá la segunda parte de la historia. Sí, es larga. De hecho, el relato se extendió a una tercera parte que publicare pronto. Espero que la esencia de la misma se mantenga y que el interés de quienes la lean se mantenga.

Hasta aquí esta publicación. Espero que la misma sea del agrado de ustedes. Me gustaría extender una invitación a @emy.pets05, @ripon0630, @cmp2020, @neelofar y a @bloomaria para que se unan a esta iniciativa.

Emoji creado en Bitmoji. Diagramación de mi autoría

Si quieres conocerme un poco más visita mi publicación de presentación en Steem atreves de este enlace