Un saludo para toda la comunidad de WORLD OF XPILAR hoy de nuevo estoy aquí para unirme al concurso lanzado por la amiga @franyeligonzalez por el cual tenemos que escribir de la imagen una historia, poema o cuento de nuestra imaginación en el cual aquí dejo mi participación.

Cierta vez un barco mercante Español zarpo de las islas Canarias para el nuevo mundo, todos quisieron emprender el viaje a colonizar tierras extrañas, donde para estas personas inocentes no sabía que le esperaba en su destino en el nuevo mundo, estos barcos venían uno tras del otro a colonizar nuevas tierras y hacerse dueñas de ellas. En el barco venían padres y madres con sus hijos, con la alegría de que su imperio tenia nuevas tierras y lo que más pensaban ellos eran fundar nuevas haciendas con mano de obra esclava para amasar las fortuna para lucro propio.

El viaje desde las islas Canarias hasta el nuevo mundo nunca era fácil, tenían que aguantar meses en su recorrido, sorteando tormentas, enfermedades y plagas de ratas dentro del banco y el que moría era lanzado al mar para que lo tiburones se los comieran, todo aquello que tenían que pasar era muy fuerte pero todo eso lo hacían a costa de llegar al nuevo mundo y lo que pensaban eran hacerse millonarios de las riquezas del nuevo mundo, en especial le gustaba una nueva provincia española llamada Venezuela donde habían extensiones de tierra y se podían fundar haciendas de caña de azúcar todo lo que se miraba al horizonte. Los cuentos de sus riquezas entre los tripulantes del barco eran grandiosas y todo lo que debían hacer era llegar a las costas del nuevo mundo.

Estando a un mes de llegar a colonizar el nuevo mundo, el capital de barco tomo su catalejo y mirando al oeste diviso unas montañas rocosas que sobresalían del mar en el cual para el capitán era muy extraño ya que en las cartas de navegación no salía estos riscos espantosos que podrían hundir a un barco. El capitán muchas veces había navegado por esas agua y estaba seguro que esto era nuevo porque jamás él ni sus hombres lo habían visto alguna vez en sus vidas, lo cual el barco estaba a una velocidad de crucero por lo que ya estaba oscureciendo y tal vez no podría navegar fuera de ellas.

El capitán del barco dio la orden de virar a todo babor, para adentrarse con el barco y su tripulación entre las nuevas montañas extrañas que había viso a lo lejos. A lo que entraron por el medio de los riscos y todo se tormo muy extraño, el barco se encontraba a mitad de océano por lo que no pudieron rodear las cadenas montañosas, toda la tripulación estaban sorprendidos ya que dentro de las montañas fueron viendo que era de día y el clima era agradable, pudieron observar edificios modernos, con gente vestida como si fueran griegos. Todos se quedaron muy asombrados porque también vieron maquinas voladoras y calles con postes de luces brillantes como el día, fueron pasando por la mitad de las montañas hasta en contra una especie de edifico como una villa olímpica y debajo barcos modernos como yates.

El capitán y su tripulación no podían creerlo, había emergido de las profundidades del océano la Ciudad de la Atlántida, se encontraron con un puerto moderno y trenes eléctricos en la estación y habían unos guardias que les indicaron que podían atracar el barco en el muelle. Toda la tripulación muy extrañada bajaron del barco y se quedaron asombrados por todo lo moderno del lugar, y los guardias lo llevaron hasta el primer ministro de la Atlántida, se presentaron con el capitán y le dieron la bienvenida y le dijeron que solo se podían quedar 24 horas en la isla porque ellos se iban a volver a sumergir por 500 años en las profundidades del océano para que los humanos modernos no los consiguieran jamás y querían que dieran un mensaje al mundo ¡Que con las armas modernas ellos iban a destruir el mundo!. Los atendieron a todos y les dieron agua embotellada, alimentos que jamás habían visto y medicamentos y les dijeron que partieran y nunca más volvieron a encortar esa isla misteriosa. Fin