Nuevamente quiero congratular a la comunidad World Of Xpilar por permitir la versatilidad en el ejercicio pleno de la creación narrativa, sin duda algún promueven la lectura y el arte de escribir. Nuestro amigo @adeljose así lo considero por participar en esta plataforma De steemit, sobresaliente en su labor de proponer actividades con el propósito de hacer crecer en dimensiones extraordinaria nuestra comunidad, aplausos para él, y queda de más decir nos une como familia de Steemians.

La historia que quiero proyectar está basada en acontecimientos de la vida real, donde un joven sueña con la idea de lograr representar a Venezuela en unas Olimpiadas en la disciplina Taekwondo. La cual jamás pudo alcanzar, pero la vida le entregó algo hermoso. Algunos nombres en honor a los muchachos de aquella generación de Taekwondista le dieran la mayor recompensa por su esfuerzo, tomaremos su nombres reales; Marcos Rizo, Rocky Rojas, Marlon Gutiérrez, Carolina Mengochea, Andreina Mengochea, Vanesa Avilés, Daniel Rojas, Ronel Rengel, Keite Pinto, Jesús, Mari, Olaf, Edgar Jaramillo, Orlis Cuellos, Quiroz Alfonso, Delismar Sayago, Napo Morillo, Yusmely Jaramillo entre otros que su semblantes están perenne en la mente que se inspira, pero los nombres vagan en el laberinto del recuerdo. Para esta fecha, que tomó el teclado, Rocky, Daniel, Marcos, perdieron la vida por las hordas asesinas delincuenciales de nuestro país. El grupo de muchacho cuáles nombre en este ejercicio narrativo fueron habitantes de los sectores populares de San Simón, Negro Primero; El paraíso, La Lucha, El Mirador, Las Campiñas, de ciudad Bolívar, Venezuela, fueron etiquetados por la asociación de taekwondo como los desastrados porque no tenían dinero para pagar su cupo para patentarse como legales.

Eber era su nombre ya los años se le venían encima y su oportunidad para lograr entrar a la selección de taekwondo de su país se esfumaron. Un día le llega una correspondencia invitándolo a participar en los juegos universitarios. La cual Recibió con beneplácito, tendría que organizar su plan de entrenamiento. Así comienza la historia el Amor Pudo más.

Se presenta a la 5 de la tarde al inicio de su entrenamiento personal, empieza a calentar las extremidades, con los respectivos ejercicios de flexibilidad para realizar la rutina de pateo. Se percata que hay un niño de apenas 7 años descalzado y en short, mirándolo con admiración, le brillaban los ojos, el niño sin vacilar entra al DOJANG, o gimnasio, el cual es abordado inmediatamente por Eber.

Oye niño No puedes estar aquí, esto es un área restringida solo para atletas de alto rendimiento, a la cual el niño respondió.

-Enséñame, yo quiero aprender. La respuesta fue rápida y negativa. Eber lo espanta con regaños.

-Vete de aquí, ya te dije que no puedes estar en este lugar.

Así pasaron algunos días, y aquel niño seguía fiel mirándolo y acosándolo para que le enseñara el arte del Taekwondo.

Eber mirando la constancia de aquel niño le preguntó, ¿Cómo te Llamas, qué edad tienes? A la cual el niño respondió.

-Me llamo Daniel Rojas y tengo 6 años. ¿Me vas a enseñar? yo quiero aprender. Esas palabras fueron suficiente para que Eber Accediera a compartir sus saberes con el niño y le respondió.

-Mañana te vienes con un mono, los pies limpios y con cholas y empezamos tu entrenamiento. Aquel niño salió feliz de aquel lugar a sabiendas que no tenía mono y mucho menos chola, pero hizo lo posible y cumplió con la cita más no con lo que exigía Eber para empezar el entrenamiento.

Ya la vida ilustraba lo que iba a suceder con Eber, un joven con un don de altruismo que solo Dios lo sabe, el adelantado a lo que se imaginaba sucedería en la llegada del niño, lo esperaba para obsequiarle el mono y las cholas. Así empezó la magia del universo. Y En los siguientes día, llegó otro niño y después otro y otros y llegaron cien niños aledaños de los sectores pobres, y se conformó la escuela de Taekwondo la cual la federación le negó la posibilidad de legalizarlo porque la matrícula era completamente gratis. Y surgió aquel funesto nombre o etiqueta los desastrados de San Simón. Pero eso no amilanó a Eber y siguieron entrenando duro día tras día hasta 6 horas diarias de entrenamiento, Eber con un grupo de amigos y familiares buscaban la forma de alimentar a los más vulnerables. Para compensar el desgaste físico de aquel grupo maravilloso de niños que eran movido por el estímulo del amor. Pasaron algunos meses y cada uno daba de sí mismo lo mejor. Mientras los niños entrenaban Eber y su equipo buscaba la manera de ser reconocido.

Los días seguían pasando, el esmero de los niños se opacaba por el intento de anhelar competir, algunos de ellos empezaron afectarse por los comentarios de que ellos jamás participarán en un torneo por no estar federado. Hasta que llegó el comunicado el presidente de la federación quería exterminar para siempre el club gratuito no convenía para los interés económico. Y la supuesta mejor escuela desafío en un chequeo deportivo a la escuela de Taekwondo de la UDO.

Eber tenía que escoger 22 de los mejores para ubicarlos en sus categorías correspondiente, una vez escogido les anunció el compromiso de los combates para lograr defender al estado Bolívar había que eliminarse con todas las escuela federadas. Tenían otra limitante, carecían del Dobok.

Eber y su grupo reunieron todo lo que tenían y mandaron a confeccionar 22 Dobok, y llevaban el sello del amor, la constancia, el sacrificio. Los niños estaban felices con sus trajes, emocionados, verse uniformado era un logro para esos niños.

Llegaron los días del choque y una a una fueron derrotadas las escuelas federadas, el pacto de aquel convenio el presidente de la federación quería romper ya que ninguno de sus alumnos entraron al seleccionado. Pero el honor de 11 escuela derrotadas pudo más que la soberbia de aquel obstinado presidente de la federación de taekwondo del estado Bolívar.

Los 22 niños lograron su pase al nacional a efectuarse en el estado Delta Amacuro, seguían movido por el amor.

Se les negó transporte, comida y alojamiento, pero todas esas vicisitudes fueron superadas con la ayuda de Dios, Seguían intentando sabotear al equipo cual meritoriamente se ganó representar al estado en las categorías infantiles. Negándole a Eber estar con sus representados en el centro de Doyan. Enviandolo a las gradas de aquel complejo deportivo.

Los niños atletas tenían lágrimas en sus ojos, su Sa-Bum-Nim, no estaría acompañándolos, sintieron temor impulsado por la rabia, los dos primeros combatientes perdieron el combate. El coach impuesto sintió el valor que tenía Eber en el equipo y se retiró convocado a Eber a cumplir sus funciones de 22 combates, el equipo de taekwondo de la UDO conquistó 20 medallas de primer lugar se ganaron el trofeo y Eber recibió lo mejor que el Taekwondo le podría dar convirtiéndose en el entrenador más joven y querido por toda una comunidad de Taekwondista. El amor, el coraje, el esfuerzo, el sacrificio pudo más.

Con esto me despido hasta la próxima oportunidad, esperando cumplir las expectativas. Antes quiero invitar a que participen en creando Historia a mis amigos : @nova001 @skinnygirl @patidelc1207 @nike3010 @mariarodriguez .

Enlace del concurso: https://steemit.com/hive-185836/@adeljose/weekly-contest-creating-stories-week-21-concurso-semanal-creando-historias-semana-21