El día estaba despejado y el sol radiante, de esos que hacen que la piel arda, de esos que hacen que tus ojos supliquen por unos lentes oscuros, de esos que hacen falta de vez en cuando.

Era un día cálido, así que lo más propicio era hacer todas las diligencias que tenía pendiente de los días anteriores en que la lluvia no me permitió moverme con facilidad.

Después de almorzar salimos en la moto, hicimos paradas rápidas en la casa de mi Mamá y en la casa de mi Hermana, pero Sebas no se sintió cómodo en ningún lado, ya que sus primos no tenían ganas de jugar con él.

Visitamos entonces a mi abuela en búsqueda de Alejandra, a quien no habíamos encontrado en ninguno de los lugares anteriores, pero Ale no estaba allí.

Sin embargo, encontramos algo mucho mejor. Una familia estaba visitando a mi Abuela y llevaban consigo a una mascota muy especial. Un pequeño monito.

Mi pregunta fue inmediata. ¿Puedo tomarle fotos? en mi mente sabía que sería un retrato perfecto.

Por supuesto que me dijeron que sí, así que le hice muchas fotos, pero el monito se movía mucho, estas fueron las 2 mejores.

_{Mi participación en el CONCURSO DE FOTOGRAFÍA Y ARTE DE RETRATO SEMANA # 017 por @axeman. El Monito burlándose de Sebastián que lo quería cargar, pero el monito no se dejó.}

Luego de tomarle las fotografías dedicamos un tiempo a hacerle cariños, el se movía muy rápido, pero permitió que nos acercaramos lo suficiente para tocar sus suaves manitas y tocarle el cabello.

Fue un momento muy bonito ya que el monito parecía feliz y saludable. Sus dueños se notaban que lo cuidaban mucho. No tenía collar ni cadenas, parecía bien domesticado.

Una vez que se lo llevaron, Sebas me preguntó que podíamos tener un monito. Lo pensé unos segundos y le respondí.

• Lo siento hijo, pero yo sería incapaz que arrancar un bebé monito de los brazos de su madre. Imaginate lo que sentiríamos nosotros si nos separan. Lo mismo sienten ellos.

Sebas se entristeció mucho, al principio no estuvo muy convencido, pero yo espero que con el tiempo adopte mi forma de ver la vida.

Los animales salvajes deben permanecer con sus manadas en lugares apropiados y protegidos para ellos. Cualquier tipo de pago que nosotros hagamos solo fomentará la destrucción de la fauna.

Al igual que las aves, ardillas, incluso peces, nunca me a gustado tener animales en cautiverio. Si quiero ver peces, voy al mar y hago snorkel, si quiero ver aves solo miro hacia los árboles, si quiero ver ardillas, iguana u otros animales, voy a la montaña o al río. Si quiero una mascota, adopto un perro o gato y me aseguró que tenga libertad para correr y jugar.

_{El monito solo quería estar en las manos de sus dueños, sin embargo si dejó que lo acariciaramos un poco.}

Sebastián se quedó con la Abuela comiendo pesguas, una fruta redonda y morada que crece en un arbolito no muy grande.

Mientras yo fui a la casa de su maestra a ponernos al día con las tareas, luego fui a ver si mi tío había arreglado el televisor, hablé con el mecánico para que le arregle las luces a la moto, fui donde mi prima a comprar algunas cosas y eché gasolina de la que tenía guardada. Porque en las estaciones de servicio, ya no hay.

Cuando regresé por Sebas ya había encontrado a Alejandra y se habían puesto de acuerdo para jugar en la noche en nuestra casa.

Regresamos a nuestro hogar y decidí hacer una cena especial, para que se le quitará la tristeza de no tener un monito.

_{Carne de Hamburguesas con un hueco para colocarles huevo y cocinar a la plancha.}

Aunque no tenía lechuga ni otros ingredientes necesarios para hacer unas buenas hamburguesas, sí que disponía de los más importantes.

Cenamos ricas hamburguesas con papas fritas en compañía de Alejandra y mientras ellos conversaban yo navegaba por internet y visitaba a mis conocidos de Steemit.

_{Hamburguesas con papas fritas... El pan que compré era más grande de lo normal, ninguno pudo comérselas todas así que lo que sobró se lo dimos a nuestra perrita Manchita.}