La disciplina es algo fundamental para la vida. Desde que nacemos nuestra familia siempre ha buscado la mejor manera de inculcarnos la disciplina de diferentes maneras, de hecho hay muchas actividades que nos ayudan a tener disciplina como el deporte, la música, la disciplina militar, escolar, laboral, educativa entre otras.

       Como músico desde niña he estado sumergida en él mundo de la música y aunque ella nos brinde mucha alegría y nos ayuda a liberar nuestro espíritu, debemos aprender a respetarla. Formo parte del Sistema Nacional de Orquestas Juveniles e infantiles de Venezuela y allí he aprendido cosas hermosas. La matrícula que he estado atendiendo durante 9 años ha sido más de 1500 niños, pero esto no lo he hecho solita, siempre me ha acompañado en este trabajo musical mi esposo @danieldedosd2 y ha sido una experiencia hermosisima en donde hemos llorado, reído, hemos ayudado a superar los miedos de muchos niños que algún día pensaron que era imposible poder cantar o tocar.

       Así que la disciplina más hermosa que he vivido y compartido es la música y seguiré respetandola porque eso me ayuda a mejorar mi trabajo no solo personal, sinó también en el ámbito laboral, es maravilloso poder poner en práctica la disciplina, incluso en el hogar.

       Juntos podemos cooperar para ayudar al mundo a tener disciplina, y comenzando desde el hogar para que nuestros niños puedan crecer sembrando conciencia siempre y cuando sus derechos siempre sean respetados y valorados.

       Aquí les muestro unas imagenea de varios momentos que he vivido a nivel musical, los cuales han hecho de mi mejor persona y me ha hecho entender que la disciplina siempre comienza por nosotros.

       Vivir en la música me hace muy feliz, en ella puedo encontrarme a mi misma y nivelar mis emociones, es una disciplina maravillosa que forma parte de mi trabajo y de mis estrategias de educación. Agradezco poder tener la oportunidad de hablar de este tema tan interesante que nos une a todos de manera integral. Luchemos juntos para todos los niños del mundo puedan creer en ellos y en todo lo que pueden lograr si tienen una disciplina que los ayude a desarrollar su coeficiente intelectual y los haga más capaces y virtuosos.