Marina vivía con sus padres muy feliz, con su esposo y su niña de Anita, pero un día llegó su hermano Luis que había tenido problemas con su mamá y le pidió hospedaje por unos días.

Por ser su hermano menor Marina no tuvo problemas en recibirlo. Así los días se hicieron semana y Luis no buscaba que hacer solo se quedaba en casa con Anita.

Su mamá la llamo y le dijo que tuviera cuidado con su hermano que había nacido con el "corazón negro" ella no entendía porque su mamá se expresaba de esa manera.

Pero al pasar los días, notó que ya su niña no sonreía y se acercó a ella a ver qué pasaba, como siempre había tratado de darle confianza.

Anita le confesó que Luis la tocaba extrañamente, pero le decía que si ella hablaba sus padres se molestarían.

Marina llamo a Luis y lo hecho de su casa, pero lamentablemente el daño estaba hecho, su hermanito menor había robado la inocencia de su niña y de esta manera entendió porque su mamá le advirtió que su propio hermano tenía el corazón negro.