Weekly Contest, "Creating Stories Week #20". /Concurso Semanal, "Creando Historias Semana #20" || CARYUM: MI VECINA ES UNA MOMIA

Me vine a los Angeles por mi trabajo, como actor mi vida está llena de dramas y de viajes. Cómo soy muy reservado preferí comprar una pequeña casa en un pueblo poco conocido; Boltizar, lugar de leyendas extrañas que llegaron a captar mi atención desde que me las mencionaron.

Según los residentes de este pueblo una vez existió una familia reconocida y popular entre los habitantes; la familia Mongomeri. El padre (el señor Tobías), la madre (la señora Elyn), su hijo (el pequeño Timmy) y su hija mayor (Elyndress). Fueron la familia ejemplar en los años 50. Los nombres tan peculiares de las mujeres Mongomeri llamaron mi atención y resulta ser que la señora Mongomeri viene de un linaje de Egipcios; los Caryum. Personas que practicaban actos ilegales como ofrenda a los muertos vivientes quienes llamaban Momias.

Solo las personas de la realeza podían convertirse en momias y seguir protegiendo a su familia por generaciones. Luego de su muerte ellos podían seguir viviendo, pero sus vidas no serían las mismas. Según la leyenda las momias deben alimentarse de carne fresca. Para no comer a otros humanos los Caryum decidieron comer animales, de preferencia muy grandes para solo salir a cazar una vez al mes. Sin embargo, otra tribu no estaba de acuerdo con ellos; los Palerko. Unas sangrientas familias llenas de odio hacia las personas normales.

Los habitantes del pueblo donde me estoy mudando dicen que fue en este pueblo donde la familia Mongomeri vivió por muchos años hasta que la madre, la señora Elyn; falleció por una extraña enfermedad en los huesos. La leyenda dice que cada cinco años vuelven al pueblo para evitar que los Palerko cumplan su objetivo de cazar a los humanos.

Historias y leyendas que hicieron por un tiempo que este pueblo fuera el centro de atención, pero como todo lo bueno, siempre tiene un fin y esto no fue la excepción.

"¿Eres el vecino nuevo? Soy Caly y él es mi hermanito Patrick" -Una joven pequeña se me apareció de la nada mientras bajaba mis últimas cajas del carro. Sus ojos verdes me hipnotizaron por un momento. Junto a ella estaba un niño pelirrojo al igual que ella pero él parece ser algo tímido.

"Hola, si, soy el vecino nuevo. Mi nombre es Clarck. Es un placer conocer a mis nuevos vecinos. ¿Y sus padres, dónde viven ustedes?"- Luego de mi pregunta el niño sonrió y salió detrás de su hermana.

"Mis padres te enviaron un mensaje. Quieren que nos visites en la cena" -contesta el pequeño Patrick.

"Disculpa el atrevimiento, es que nos gusta darle la bienvenida a nuestros vecinos porque sabemos lo incómodo que puede llegar a ser el pueblo" -Agrega Caly.

"Me agrada la idea. ¿Les parece bien a las 6?" -sus caras se llenaron de alegría.

"A esa hora está perfecto. Te esperamos señor Clack" -contestaron al mismo tiempo.

A la hora de la cena, me dirigí a la casa de los niños; la casa al lado de la mía. Los padres me recibieron con mucha cordialidad y cortesía. Elvis y Marta Smith, realizaron una cena deslumbrante y los niños se portaron muy bien. Cuando regresé a casa tenía en mente lo que el padre de la familia me dijo: "Debes tener cuidado con los habitantes del pueblo. Un consejo que te daré como anciano. No confíes en nadie, ni en nosotros". No es algo que alguien quiera escuchar de sus vecinos, mucho menos siendo nuevos.

Pasan los días, las semanas y los meses viviendo en aquel extraño pueblo que me ha demostrado ser un poco más anormal de lo que parece. Caly, mi vecina de 20 años, ha llamado mi atención desde el primer día y no he sido capaz de expresarle lo que siento. Su familia me ha tratado tan bien que tengo miedo de empeorar las cosas haciendo algo que no les guste o sea de su agrado.

Por otro lado, el pequeño Patrick de 14 años quiere que su hermana no sea tan unida a mí, pero el mismo no deja de pasar el tiempo conmigo. No lo comprendo muchas veces, tanto él como sus padres actúan de una forma extraña cuando los visito por las noches. Sin embargo, a Caly parece no importarle mi presencia en las noches.

Una vez, mientras ensayaba mis líneas en el patio trasero de mi casa en la madrugada, pude ver qué la madre de Caly salió a su patio y encendió una lámpara antigua que estaba allí, miro al cielo y su piel no se veía nada bien. Tenía un aspecto verdoso y con muchas ronchas, hasta que de repente una luz la iluminó y su piel cambio a una muy lisa y sana. Me impactó mucho y me escabullí para que no notara mi presencia, al otro día le pregunté a Caly sobre aquel acontecimiento ya que con ella tenía más libertad de preguntar cosas incómodas para sus padres.

La respuesta de Caly me asombró aún más:

"Mi familia tiene un secreto algo escalofriante para los desconocidos. Verás Clarck, yo te lo contaré solo porque mi familia te quiere mucho y te intenta proteger. ¿Te han contado la historia de la familia Mongomeri?"-su cara se veía tan serena.

"Si, desde el primer día que llegué aquí" -contesté. Ella saca de su bolso unos papeles viejos y en ellos están todos los nombres de la familia Mongomeri que anteriormente los otros vecinos me habían contado.

"Esta es nuestra carta de residencia, la tenemos desde hace más de 60 años. Nosotros somos la familia Mongomeri de la tribu de Caryum. Los nombres que te dimos al principio es para evitar que los Palerko nos descubran antes que nosotros a ellos"- Las piezas en mi mente comienzan a encajar. La coloración de la piel parecía de un muerto y resultó ser exactamente eso, las actividades extrañas de la familia y el porqué Patrick no quería que me enamorara de su hermana.-"Los Palerko ya están en el pueblo. Ya sabemos quiénes son y sus planes, entre esos planes de alimentos estás tú. Por eso mi familia te acogió, para protegerte de ellos. Sabemos que intentarán atacarte hoy y tenemos un plan para atraparlos" -mi corazón latía muy rápido, mis piernas temblaban.

"¿Por qué dices que antes no lo sabían quiénes son? ¿Acaso no es la misma familia?" -mi pregunta la hizo reír.

"Los Palerko que vienen aquí siempre los derrotamos. Siempre vienen familias distintas a tratar de conseguir alimentos"- se levanta de la silla y me extiende la mano.-"Ahora debes permanecer con nosotros si quieres vivir".

Luego de ese día, he estado viviendo con ellos. Me han explicado muchas de sus costumbres, me han entrenado para defenderme y me han hecho sentir parte de ellos. Si, parece extraño que diga que soy amigo de una peculiar familia de Momias pero con tanto apoyo no parecen ser lo que en realidad son.

No pasó mucho tiempo desde que me ayudaran a entrenar, un mes exacto. Los Palerko llegaron a mi habitación mientras dormía y yo no me di cuenta de que tan cerca los tenía sino fuera por Patrick quien gritó desde la sala. Desperté, un hombre con la piel enferma o muerta me amenazaba con un cuchillo de oro, yo brinque de la cama para un lado y me topé con otro hombre con el mismo aspecto tan horripilante. Caly entro a la habitación junto con su padre y ambos atacaron a los dos hombres. Yo corrí a proteger a Patrick pero un tercer hombre me atrapó, yo me intentaba defender pero era más fuerte de lo que imaginaba.

Hubo un momento en el que vi la oportunidad y lo golpee hasta que cayó al suelo, corrí en dirección a los gritos de Patrick y me encontré con él debajo de un hombre momia quien lo intenta apuñalar. Yo me balancee arriba del hombre apestoso y evité que le hiciera daño a Patrick puesto que según sus leyendas las momias pueden morir solo cuando se les apuñala con un cuchillo de oro.

Patrick salió corriendo con mucho miedo pero un cuarto hombre momia lo atrapó y sin darle oportunidad de escapar la momia lo apuñaló en el corazón dos veces, Patrick cayó al suelo frío, me miró, y luego se hizo polvo. Sentí un vacío grande, mi amigo, el pequeño niño que yo veía como un hermano menor, fue asesinado por uno de su propia clase. Mi rabia logró que me levantara rápido y tomara el cuchillo de la momia que yo había derrumbado, lo apuñalé con tanta rabia que se hizo polvo de una vez. Me brotó fuerzas de dónde yo no sabía que tenía, corrí hasta el que mató a Patrick y le quité la cabeza para después apuñalarlo y se hizo polvo. Miré a mi alrededor y otros cinco hombres con aspecto de muertos venían corriendo por mí, de repente Caly y su padre bajan a mi lado y juntos peleamos con ellos. Aún nos faltaban acabar con muchos más Palerkos.

El señor Elvis mató a tres momias uno tras otro en una velocidad sorprendente como para ser también un muerto viviente. Aún con toda su fuerza y velocidad no pudo evitar que uno de los Palerko apuñalara a Caly, sus ojos llenos de miedo me llenaron de tristeza. El dolor que el señor Elvis sintió se escuchó a través de sus gritos, sin embargo, el objeto que usaron fue solo un pedazo de vidrio, mientras que ella robó el cuchillo de oro y apuñaló a su atacante con el haciendo que este se convirtiera en polvo. El alivio que sentí me hizo más fuerte aún, no iba a permitir que mi Caly muriera. Reuní el valor y pude acabar con todos los que quedaban.

Una vez que todo terminó, nos reunimos en la sala y Caly me pidió hablar en privado.

"Ya nuestro destino ha sido completado, mi padre y yo debemos irnos a nuestras tierras. Quiero despedirme y agradecer tu ayuda con todo. Y debo explicarte algo, ¿te diste cuenta que tuviste más fuerza de repente? Hay una leyenda que cuentan en mi hogar sobre un hombre que ayuda a nuestra tribu a salvar las vidas de los humanos, es un ser normal que tuvo ancestros convertidos en momias, lo llaman el cazador. Yo solía cantar sus canciones y me enamoré de aquel cuento. Mi padre descubrió que en el pueblo se había mudado tal hombre y decidió volver a protegerlo. Los Palerko también se dieron cuenta, de que aquel hombre no sabía sobre su pasado y ellos querían terminar con el antes de que el hombre se diera cuenta. Ese hombre, ese cazador eres tú Clarck."- aquellas palabras me sorprendieron. La verdad no conozco mi pasado ya que mi vida me la pasé con padres adoptivos.

"Entonces, si mi deber es proteger a tu tribu. ¿No debería ir también contigo?"- su expresión cambio, quedó sorprendida.

"Me alegra que quieras venir pero, tu vida está aquí con los demás seres humanos."- me tocó las manos y mi corazón latió más fuerte. Tener sangre de ancestros momias creo que activó en mí la locura para enamorarme de una mujer momia. Cuando ella terminó de hablar mi impulso me ganó y la besé. Al quitarme ella sonrió, y me abraza. -"lamentablemente debes quedarte".

"No me dejes Caly, por favor"-su sonrisa vuelve a aparecer.

"Mi nombre no es Caly, ya te dije. Mi nombre real es Elyndress, Elyndress Mongomeri. Una momia enamorada de un humano, un cazador terco"- lágrimas salen por sus ojos y ruedan por sus mejillas pálidas, su piel perfecta no la hace parecer lo que verdaderamente es gracias a su magia para camuflajearse de los Palerko.

"Y yo, yo solo soy un cazador, enamorado de una mujer momia la cual no lo quiere llevar a su hogar"-seco sus lágrimas con mis manos.

"Vendrá algún día la chica indicada para tí"-responde mirándome a los ojos.

"Adiós Clarck"-responde sonriéndome y desapareciendo poco a poco, como si fuera niebla.

"No, Elyndress. Te quiero"- un susurro y un viento fue lo último que sentí.

"También te quiero, cazador. Nos volveremos a encontrar"-se fue, así como vino tan de repente, así como un huracán llevándose todo a su paso.

Dejar atrás una vida es algo complicado, dejar atrás amistades es un poco más complicado, dejar atrás un amor es imposible de soportar. Las personas en sus casamientos dicen que es hasta que la muerte los separe, pero ¿Acaso después de la muerte un amor que juró ser eterno puede dejar de existir? ¿Las personas realmente olvidan a su amor?

Eso solo lo sabe el destino. Pero de algo estoy seguro, me enamoré de mi vecina.

Mi Vecina es una Momia

---

¡Gracias por la lectura! Esta es mi participación en el concurso Creando Historias en su semana #20 creado por @adeljose