y se metieron en una nave espacial que había y salieron del planeta. Anduvieron por el espacio hasta que vieron una luz grande que brillaba sin cesar no muy lejos del sol. Al acercarse más les llamó la atención tanta brillantez y el color. Era un planeta verde. Decidieron aterrizar. Una vez ahí, tenían miedo de salir de la nave porque no sabían si podían respirar ni las condiciones del planeta si eran apta para el ser humano. Pero salió un valiente y se arriesgo a salir. Al salir no le ocurrió nada y después todos salieron. Para ellos eso fue alegría y un respiro porque ya podían estar en un lugar. A ellos les brillaban sus ojos por ver tan impresionante estructuras de cristales. El planeta verde brillaba debido a los rayos ultravioletas que acariciaba sus caras hexagonales piramidal de sus cristales verdes y el poco haz que liberaba hacían del planeta inmune a toda clase de virus y hongos mortales. También observaron un aro de color naranja amarillento y descubrieron su hermosa función. Cuando los rayos ultravioleta incidian en el aro este se convertía en oxígeno y ahí el poder respirar en el planeta. Había un mar por lo que se alegraron era igual al de la tierra. Tenía vida animal dentro de ella. Al observar aquellas impresionantes condiciones se alegraron porque podían subsistir en el planeta verde. Vivieron de la pesca de toda clase de animal que había en el mar. Se inventaron de hacerse vestimenta de cristales y las casas también de cristal.