Debía salvarla y me quedaba poco tiempo en este mundo tan diversificado, primero tenía que atravesar el "Gran Pantano" dónde muchos dicen que es el hogar de un ser muy extraño que es mitad sanguijuela y al mismo tiempo serpiente. A través de mi don podía escucharla gritar muy lejos desde muy lejos.

En mi trayecto, la canoa se estancó a mitad del viaje y me tocó sumergirme en medio del pantano, no lograba ver nada debajo del agua pero mi don me permitía escuchar y así visualizar mediante las ondas sonoras producidas por el movimiento del agua, tuve que esforzarme para lograr sacar el obstáculo y cuando lo hice llegué a sentir un mordisco en mi columna, inmediatamente subí a la superficie, mi compañero Yrih empezó a gritar y le pregunté que le pasaba, con el remo me golpeaba en la espalda, en eso pude ver una gran piraña que volvió a las aguas.

La herida era grande y comencé a sangrar al punto que me desmayé. Cuando desperté nuevamente ya nos encontrábamos al norte, un poco más cerca de donde ella estaba aprisionada; sé que no les había contado pero fue su padre el brujo de Cañalar que la secuestro para separarla de mí, lo bueno es que mis amigos los elfos me obsequiaron este don y así me facilitaron la oportunidad de volver a estar en sus brazos.

Después de cuatro largos días atravesando la cordillera, una serie de velociraptores nos tomaron desprevenidos y empezaron a perseguirnos, no supe que le pasó a Yrih, luego de eso no lo volví a encontrar. Me olvidé de mi amigo, porque cada segundo perdido me podría costar la oportunidad de salvar a mi chica; ya que a media noche me transportaria otra vez al mundo normal y quería llevarla conmigo.

Al fin me encontré frente a la cárcel que estaba resguardada por pterodáctilos, estos son sumamente rápidos en su vuelo. Me vino una idea de pintarme con lodo para camuflajearme como una piedra y arrastrarme por todo el suelo hasta llegar al lugar. Comencé lentamente para pasar desapercibido, todo iba muy bien hasta que un alacrán se ubicaba frente a mí, estaba algo nervioso y no encontraba como quitar ese obstáculo; con mi mano lo moví e incrustó su aguijón en mi muñeca, salí corriendo del dolor por detrás de la cárcel y los pterodáctilos no me vieron.

Mis pulsaciones se aceleraron por el veneno y comencé a sudar, había un riachuelo así que metí el brazo completo para poderme relajar, y lo logré aunque el dolor persistía. Ya la luna había salido lo que me indicaba que se acercaba la medianoche y me introduje velozmente a través de un conducto, de repente siento una brisa muy fría y percibo el sonido de agua que venía por el túnel, me tocaría recibirla, a lo lejos pude visualizar que era agua pestilente, no me quería llenar de eso, así que abrí muy rápido un ojete y escape de ese momento desagradable.

Ya estaba en un pasillo muy oscuro, no sabía con me tocaría enfrentarme a partir de ese momento. Solo pensé en correr hasta el final y sorprendentemente allí estaba ella dormida, pero una puerta con codificación se oponía entre nosotros. Ya no sabía que hacer hasta que ella despertó y me miró, posó su mano sobre la puerta y en eso comencé a desaparecer, ya había llegado la hora.

GAME OVER

Está es la historia que pasa por la imaginación de un niño mientras participa de un juego referente al rescate de una princesa en un mundo mágico.

El Fin

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Está es mi participación en el concurso de escritura propuesto por @xpilar. Invito a participar a @danielsanz, @shoday y @luceero.

Vamos por más!

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